Estadio Deportivo3 min lectura
En el caso del conjunto valenciano será también el cierre de una primera vuelta de la fase regular que ya es notable para el equipo de Jaume Ponsarnau con las diez victorias que acumula en su casillero. Son tres más de las que tiene el equipo alavés, aunque en su caso aún debe disputar un último choque de esta ronda inicial ante el Alba Berlín.
Para el Valencia ganar, supondría tener por tanto un colchón de tres o cuatro victorias con un rival directo para estar entre los ochos primeros al final de la fase regular y disputar los cuartos de final de la competición. Los enfrentamientos entre el Madrid y Anadolu Efes, Bayern de Múnich y Barça y Armani Milán y CSKA de Moscú, todos ellos cercanos en la tabla, elevarían el valor de un triunfo.
El de este martes será el segundo enfrentamiento de ambos equipos en esta temporada, pues ambos se midieron en la primera jornada de la Liga Endesa. Aunque la evolución del Valencia es evidente desde entonces, en la ajustada derrota que sufrió en el Fernando Buesa Arena tuvo mucho que ver sus problemas para frenar al tándem Pierria Henry-Lucas Vildoza, que selló con un triple el triunfo local.
El equipo valenciano afronta este choque tras haber sumado una plácida pero bien trabajada victoria en la Fonteta ante el Acunsa GBC en un choque que le ha consolidado entre los ocho primeros de la ACB y le ha acercado a la Copa del Rey.
El único ?pero? del encuentro fue el golpe que recibió en el muslo izquierdo Guillem Vives que le hace ser duda para un encuentro en el que será baja segura Vanja Marinkovic. En principio también lo será Louis Labeyrie, aunque en su caso ultima ya su regreso tras una lesión muscular lo que deja un resquicio a que pueda estar al menos en el banquillo.