Estadio Deportivo3 min lecturaZaragoza, 30 abr (EFE).- Cuarta victoria consecutiva. Ese es el objetivo que se marca este domingo el Casademont Zaragoza en su enfrentamiento en el pabellón Príncipe Felipe con el Surne Bilbao, en un partido en el sabrá de antemano la importancia de lo que necesita hacer para asegurarse lo antes posible la permanencia porque es el que cerrará la trigésima primera jornada de la Liga Endesa.
Los zaragozanos llegan en su mejor momento de la temporada, tres triunfos consecutivos frente a Monbus Obradoiro, Barça y Río Breogán, y quieren prolongarlo lo máximo posible frente a un rival que buscará en la capital aragonesa apurar sus escasas opciones de hacerse un hueco en el grupo de elegidos para disputar las eliminatorias por el título.
En el análisis de las opciones de los rojillos, su técnico, el serbio Dragan Sakota, ya dejó claro que hasta que no esté confirmado matemáticamente no se puede dar nada por hecho y sobre todo con las sorpresas que han saltado en las últimas jornadas.
"La única certeza es que cada victoria nos acerca al objetivo", afirmó a la vez que recordó que el factor puntos no lo tienen fácil con sus rivales directos y por eso necesitarán para lograr la permanencia sumar un triunfo más que ellos.
Para este partido, Sakota podrá contar con todos los jugadores de la plantilla por lo que el único descarte volverá a ser el ala-pívot belga Hans Vanwijn.
La jornada está intercalada en el puente del Día del Trabajo, pero los rojillos confían en que sus seguidores volverán a volcarse en su apoyo y darles el aliento para superar al conjunto que dirige Álex Munbrú, porque como remarcó Sakota "estamos todos en esto".
"Su ayuda es muy importante en el partido, como lo ha hecho en los anteriores. Esperamos que sobre todo nos ayuden en los momentos difíciles, que llegarán, porque ante equipos que rinden tan bien, es difícil controlar el partido los 40 minutos", dijo.
El partido entre zaragozanos y bilbaínos se jugará este domingo, a partir de las 20.00 horas, en el pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza.