Erika de Souza: "En el deporte es muy difícil la igualdad"

Erika de Souza: "En el deporte es muy difícil la igualdad"
Erika de Souza: "En el deporte es muy difícil la igualdad" - Justino Sanchón
Estadio DeportivoEstadio Deportivo 6 min lectura

La pívot brasileña Erika de Souza, que con 36 años fue hace un par de jornadas la MVP de la liga española, afronta los "dos años" que le quedan en competición convencida de que tiene "suerte" de ser baloncestista, pero también de que ganaría "mucho más" si fuera un hombre porque, dijo, "en el deporte es muy difícil la igualdad".

Desde la falta de presupuesto de los equipos femeninos hasta las diferentes condiciones en viajes y concentraciones, pasando por "lo complicado" que es para una jugadora formar una familia, como es ahora su intención, De Souza ha conocido durante su carrera todas esas circunstancias que lamenta, más en un deporte en el que "las mujeres son iguales o mejores que los hombres".

La brasileña, una de las jugadoras más veteranas e importantes del panorama internacional, ha destacado en diferentes equipos de Brasil, Europa y Estados Unidos y ha disputado con la selección de su país los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, Londres 2012 y Río 2016.

Erika de Souza lleva 312 partidos disputados en la liga española, en equipos como los desaparecidos Barcelona y Ros Casares, aunque es ahora, en Perfumerías Avenida de Salamanca, con el que ganó la Euroliga en 2011, donde disfruta de otro momento de esplendor. El club lidera la liga con 25 victorias y solo una derrota.

Esta temporada se le ha hecho "complicada" sobre todo por sus problemas en las rodillas, explicó en una entrevista con Efe. Pero, pese a su situación física, logró hace dos jornadas ser la jugadora más valiosa, la MVP, con 32 tantos de valoración, logrados gracias a sus 24 puntos, 11 rebotes, 2 asistencias, 2 tapones y 1 falta recibida.

"Ser la MVP fue una sorpresa, aunque reconozco que desde que empecé a jugar siempre lo he hecho igual, ahora un poco menos por la edad y por los problemas en la rodilla", indicó.

Sin embargo, aseguró que se siente "muy bien, mucho mejor que algunas jóvenes que tienen 20 y a las que si no les duele una cosa les duele otra".

"No parece que tenga 36 años", añadió.

Con esta edad, ya tiene claro que le quedan "dos años" para jugar en la alta competición, bien sea en el Perfumerías Avenida o en otro club europeo, del que tiene ya ofertas, aunque su prioridad es seguir en la capital salmantina.

Ella espera que le llegue una oferta desde Perfumerías Avenida, un club en el que se siente "muy a gusto, muy cómoda" y al que volvió en 2016.

Erika de Souza es consciente de la "suerte" que tiene de ser baloncestista, de disfrutar de su verdadera pasión, y ahora de mirar hacia adelante con la esperanza de ser madre. Hace un mes se casó en Salamanca con un profesor de educación física, también brasileño.

La jugadora cree que es "prácticamente" imposible para una mujer tener hijos mientras está en el deporte de alta competición, porque "es muy difícil estar fuera nueve meses y, después, cuidando a los hijos", además de que "se pierden muchas cosas".

Por ello, una deportista profesional "no se plantea tener hijos y seguir jugando".

"O nos casamos y montamos una familia o seguimos jugando. Las dos cosas no se pueden hacer en el deporte. Es rarísimo ver a una jugadora con una familia y que siga jugando. Acabo de cumplir los 36 años y acabo de casarme", señaló.

Sobre otros modos de discriminación, la pívot brasileña fue clara: "En Brasil sí me siento discriminada", ya que, explicó, "los chicos de la selección tienen vuelo de primera clase y cada uno está en una habitación solo en el hotel".

Mientras, las mujeres están "fuera del mundial" que se disputará el próximo septiembre en Tenerife, pese a ser un equipo que "siempre ha sido una potencia en el baloncesto".

En España, aunque no se siente discriminada por ser mujer, es consciente de que si fuera hombre "ganaría mucho más".

También asume que está en una liga, la española, con una gran diferencia entre los equipos que la forman, tanto de calidad como de presupuesto, y en la que el suyo es el que está arriba.

Es "una lástima", opinó, "la falta de patrocinios".

"Cuando llegué a España había mucho dinero, con 16 o 20 equipos. Y ahora, yo creo que por la crisis, en un club se paga mucho por una jugadora y los demás equipos no tienen tanto dinero", indicó.

Para Erika esta falta de presupuesto no afecta tanto al deporte masculino, algo que "viene desde hace muchos años y para lo que todavía no hay respuesta".

Unete a nuestro canal de Whatsapp Únete a nuestro canal de Telegram