Primer fin de semana de esquí en Cataluña

Este fin de semana será el primero de esquí en Cataluña después de que el pasado lunes abriesen las estaciones, que habían acordado por consenso mantener el cierre durante el puente de la Constitución para contribuir de esta manera a frenar los índices de contagio de la pandemia.

La situación se acerca poco a poco a la normalidad, ya que los esquiadores con las nuevas normas decretadas por el Govern podrán a partir del 21 de diciembre llegar de la comarca a la que pertenece cada dominio esquiable, pero también de otras en casos de segundas residencias o reservas hoteleras.

Las diferentes estaciones disponen de grosores que oscilan entre los 20 centímetros en las cotas más bajas y los 90 en las más altas, en este caso en Tavascán.

La calidad de la nieve es polvo en Boí Taull, La Molina y Vall de Nuria; polvo-dura en Espot, Masella y Port Ainé; dura en Baqueira Beret y Tavascán y húmeda en Vallter 2000.

Mientras, las estaciones se mantienen cerradas en el Pirineo de Francia y Andorra, aunque algunas de esquí nórdico han podido iniciar la campaña.

Los accesos en Cataluña se realizan con control de aforo para evitar aglomeraciones y únicamente se tramitan los forfaits adquiridos previamente de manera telemática.

Los alquileres de material también aplican medidas de prevención de la covid y resulta en todos los casos obligatorio el uso de mascarilla con la excepción del momento de deslizarse por pistas.

El fin de semana, se podrá por lo tanto ver de nuevo a esquiadores bajando por las pistas catalanas, aunque se prevé desde el lunes una imagen poco habitual una vez finalizada la jornada, el tiempo conocido como après-ski, con las restricciones impuestas a la restauración que provocarán una nueva normalidad blanca.