BALONMANO COPA ASOBAL

Barça-Logroño y Bidasoa Irún-Granollers, semifinales de la 32 Copa Asobal

Barça-Logroño y Bidasoa Irún-Granollers, semifinales de la 32 Copa Asobal
Barça-Logroño y Bidasoa Irún-Granollers, semifinales de la 32 Copa Asobal
Estadio DeportivoEstadio Deportivo 6 min lectura

Zaragoza, 12 may (EFE).- La 32ª edición de la Copa Sacyr Asobal de balonmano enfrentará en semifinales al vigente campeón, el Barça, y el BM Logroño La Rioja y en la otra eliminatoria el Bidasoa Irún lo hará contra el Fraikin BM Granollers, en un torneo que se retomará con el cien por cien de aforo tras los dos años de pandemia.

El sorteo de esta Copa Asobal se ha celebrado este jueves en el Salón de Recepciones del Ayuntamiento de Zaragoza, ciudad que acogerá los próximos 4 y 5 de junio esta competición en el pabellón Príncipe Felipe, con la presencia de la concejal de Deportes, Cristina García, el presidente de Asobal, Servando Revuelta, y el director general de Deportes del Gobierno de Aragón, Javier de Diego, además de representantes de los cuatro clubes participantes, entre otros.

Este sorteo contaba con dos cabezas de serie, el primer y el segundo clasificados de la primera vuelta del campeonato, el Barça y el Bidasoa Irún.

Los azulgranas partirán como máximos favoritos en esta competición que han ganado de manera consecutiva en sus diez últimas ediciones, la anterior frente al Sinfin Cantabria, y acumulan en sus vitrinas un total de 16 de los 31 títulos que se han puesto en juego desde que en la temporada 1990-1991 se disputó la primera edición en la que se impusieron los cántabros del Teka Santander.

En estas diez temporadas, los otros tres contendientes en estas semifinales ya han tenido la oportunidad de intentar poner en cuestión a los blaugranas en al menos una ocasión -Fraikin Granollers (3), Bidasoa Irún (2) y Logroño La Rioja (1)- pero siempre han terminado cediendo al poderío azulgrana.

El objetivo de los riojanos en esta complicada eliminatoria en la que partirán como víctima propiciatoria será el de tratar de poner en cuestión el aplastante dominio que ejerce el equipo que desde esta temporada dirige Carlos Ortega en sustitución de Xavi Pascual, en todas las competiciones españolas.

Al margen de la derrota en los despachos federativos de esta temporada por alineación indebida contra el Torrelavega, los barcelonistas llevan cuatro años sin perder, desde el 13 de abril de 2018 cuando perdieron el Palau Blaugrana contra Granollers.

Por su parte, guipuzcoanos y vallesanos se jugarán el otro puesto en la final en un enfrentamiento que se presenta tremendamente igualado y equilibrado, en la que los detalles serán los que terminarán decidiendo una eliminatoria dado el nivel tan parejo que vienen exhibiendo esta temporada.

Esta será la tercera vez que la capital aragonesa albergará esta competición, la primera en la temporada 1998-1999 en la que el Ademar León se impuso al Barça, en la que fue la segunda derrota en una de las seis finales que han perdido en la historia de esta competición, mientras que en la 2005-2006 el BM Ciudad Real derrotó al Portland San Antonio.

El sábado, 5 de junio, abrirá la competición el partido Barça-Logroño La Rioja a partir de las 17.45 horas, mientras que la otra semifinal entre Bidasoa Irún y Fraikin Granollers se jugará a las 20.00 horas, salvo que las televisiones decidan cambiar el orden.

La final se ha programado el domingo, 6 de junio, a partir de las 18.00 horas. Para estos partidos ya se han puesto a la venta las entradas y abonos con un precio entre 15 y 25 euros.

A la vez se disputará la 13 edición de la Minicopa con la participación de ocho equipos de categoría juvenil, los cuatro de categorías inferiores de los finalistas, además de cuatro conjuntos aragoneses: Huesca Lasaosa, Dominicos, Moncayo-Casablanca y Almogávar.

En la presentación, Cristina García ha destacado que Zaragoza llevaba "muchos años sin balonmano de élite y se merecía un evento así", mientras que el director general de Deportes del Gobierno de Aragón, Javier de Diego, ha incidido en la importancia de convertir a la capital aragonesa en "el foco de atención del balonmano nacional".

Servando Revuelta ha recordado que en Zaragoza pasó tres temporadas en su época de jugador y ahora como presidente de la Asobal se ha valorado "el potencial de la ciudad para cualquier tipo de evento", además de contar con el pabellón Príncipe Felipe para albergar la competición de elite y junto a él la pista del CDM La Granja que albergará los partidos de la Minicopa, aunque esta final se jugará previa a la de los mayores.

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