Estadio Deportivo3 min lecturaPaco Jémez, entrenador del Rayo Vallecano, declaró este viernes que su equipo llega con "un nivel alto" para medirse en el debut liguero al Mirandés, un rival que "no va a regalar nada" y contra el que deben "saber gestionar bien el balón".
El Rayo Vallecano afronta este partido tras una pretemporada en la que ha disputado siete encuentros, de los cuáles tres los empató y cuatro los perdió. "Cuando empieza la temporada todos esperamos lo mejor y llegamos en un nivel alto al primer partido. Va a haber muchos equipos que luchen esta temporada por conseguir el ascenso", dijo Jémez en conferencia de prensa.
El Mirandés regresa a Segunda dos años después de perder la categoría y Jémez destacó: "Va a venir con muchas ganas e ilusión y no va a regalar nada. Es un equipo muy intenso y con las ideas muy claras. Tenemos que saber gestionar bien el balón y vigilar mucho sus salidas".
Una de las dudas que mantiene Paco Jémez es la del extremo izquierdo Álex Moreno, cuya salida está negociando el Rayo con el Betis. "No sé si voy a poder contar con Álex Moreno. Es un tema que se está volviendo muy desagradable para todas las partes. Hoy es jugador del Rayo y como tal tiene que comportarse. Hasta ahí puedo leer", señaló.
Jémez también habló sobre el clima de tensión que se vive entre la directiva del Rayo y una parte de la afición que ha anunciado que no entrará al estadio, pese a tener su abono, al tener diferencias con la gestión que está llevando a cabo Raúl Martín Presa.
"Estamos empezando una temporada y hay un problema con una parte de nuestra afición. Es una guerra en la que al final el equipo es el que sale perjudicado. Necesitamos a todos porque todos queremos lo mejor para el Rayo", dijo Jémez, que quiso ser diplomático en su discurso.
"Respetamos la decisión de esa parte de la afición, pero pedimos su ayuda porque son una parte muy importante. Yo soy mayorcito para posicionarme donde creo que debo. Quiero mucho a mi afición y quiero mucho a mi club", subrayó.