Estadio Deportivo3 min lecturaLa selección sueca se mostró "decepcionada" por la inesperada derrota de este jueves contra Georgia en Batumi (2-0), un resultado que varios medios de este país nórdico coinciden en señalar como un "fiasco" que la aleja del Mundial y que añade tensión a su visita a Sevilla para enfrentarse a España en el estadio de La Cartuja.
"Estoy decepcionado, muy decepcionado", declaró al canal CMore el delantero del Milan, Zlatan Ibrahimovic, que volvía a jugar con Suecia después de varios meses. El conjunto entrenado por Jan "Janne" Andersson tuvo que haber marcado algunas de las muchas oportunidades que tuvo antes del 1-0, "independientemente de que jugásemos mejor o peor", señaló "Ibra".
"Nos queda un partido, tenemos que hacerlo lo mejor posible. Somos todos profesionales y asumimos la responsabilidad. Tenemos que recuperarnos de la mejor manera. Allí (en Sevilla, contra España) será un partido distinto. No vamos a gozar de tantas ocasiones, habrá que meter las que tengamos", dijo la estrella sueca.
Su compañero en la delantera, Alexander Isak, atribuyó también a la falta de acierto el resultado y se mostró abatido. "Me siento vacío ahora. Veremos cómo acaba el Grecia-España. Estoy decepcionado", dijo al mismo canal el delantero de la Real Sociedad.
El capitán sueco, Victor Nilsson Lindelöf, dijo sentirse "una mierda" después de un partido "que no debimos perder" y asumió su falta de contundencia en el segundo gol georgiano: "La cagué". Andersson, por su parte, incidió en que su equipo tuvo ocasiones "suficientes" para adelantarse, pero que hay que marcarlas, algo que sí hizo Georgia, a la que felicitó, no sin apuntar que el rival había tenido algo de suerte en los goles.
El seleccionador sueco admitió que quizás habían abusado de los balones por alto a Ibrahimovic, pero lo justificó porque Georgia se había echado atrás y no había huecos. "Estamos listos para reponernos el domingo contra España y jugar mejor", afirmó. Expressen calificó de "enorme fiasco" el resultado, calificativo idéntico al usado por el otro tabloide sueco, Aftonbladet, que habla de una de las derrotas "más brutales" de Suecia.