Estadio Deportivo3 min lecturaBarcelona, 22 abr (EFE).- El Espanyol llegaba al partido de este jueves contra el Rayo Vallecano en el RCDE Stadium (0-1) con un discurso ambicioso, buscando escalar posiciones y sellar la permanencia en Primera, pero firmó un duelo especialmente gris y espeso frente al cuadro madrileño.
El entrenador, Vicente Moreno, realizó un resumen tan escueto como contundente después de la derrota: ?Es el peor encuentro que hemos hecho en las dos temporadas que llevo aquí. Pido disculpas?. El equipo desapareció en su estadio y sigue con los 39 puntos en la clasificación.
El rendimiento del Espanyol frente al Rayo estuvo por debajo de lo habitual. No tuvo tensión suficiente y falló en todas las facetas del juego, en ataque y en defensa: no encajaba en casa desde el 20 de febrero contra el Sevilla (1-1). Sus principales estandartes, Raúl de Tomás y Sergi Darder, tampoco brillaron.
La permanencia es el primer objetivo del cuadro blanquiazul. No pudo concretarla frente al Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano (2-1), un choque marcado por la polémica del VAR, ni tampoco ante al Rayo Vallecano. La salvación está virtualmente sellada, pero todavía no es una verdad matemática.
La asistencia ayer al RCDE Stadium, con 11.873 espectadores, fue la tercera peor de la temporada después de Elche y Villarreal. No ayudó que el partido fuera entre semana, un jueves, pero no parece un buen dato para medir la conexión con la grada en este tramo de competición.
Tampoco es positivo que el rendimiento en casa, uno de los baluartes del curso, vuelva a tambalearse. En su estadio, el Espanyol ha sumado 31 puntos de los 39 que acumula. El Rayo rompió la racha del anfitrión de cinco partidos sin perder: la última derrota como local fue el 21 de enero contra el Betis (1-4).
Al equipo catalán le faltan cinco jornadas para cerrar el curso: Real Madrid, Osasuna, Alavés, Valencia y Granada. El vestuario se centra ahora, además de buscar la posición más alta posible, en ganar crédito ante los suyos y firmar un final de curso competido e ilusionante.