Estadio Deportivo3 min lecturaCracovia (Polonia), 21 junio (EFE).- La selección polaca, comandada por Robert Lewandowski retoma este lunes los entrenamientos en tierra polaca, donde fue recibida calurosamente por cientos de aficionados que celebraron el empate del sábado ante España como si fuera una victoria.
La afición incluso ha acuñado el algo exagerado término de "baño polaco" para describir lo que ocurrió en La Cartuja de Sevilla.
Los hombres de Paulo Sousa fueron saludados como héroes por sus seguidores, que les gritaban "gracias" desde el perímetro de seguridad mantenido por la policía.
La escuadra polaca llegó este lunes a Gdansk desde el hotel de Sopot, donde tiene su base para volver a ejercitarse en el terreno del estadio Arena y permitir que los médicos examinen a Janek y Fabianski, que volvieron tocados del choque con España.
A su llegada a Polonia, Sousa permitió a su escuadra tomarse el resto del día libre y les felicitó por haber mostrado "coraje, ambición, confianza en sí mismos" y probar que "pueden ganar a cualquiera".
"Mis soldados me enseñaron lo que quiero ver todos los días", concluyó el seleccionador.
El empate a uno conseguido en Sevilla mantiene vivas las esperanzas de Polonia, que comenzó su andadura en la Eurocopa con mal pie al perder con Eslovaquia por 1-2.
Ahora, solo una victoria frente a Suecia el próximo miércoles podría permitir a los polacos avanzar de fase, lo que llevó a los aficionados concentrado en Sopot a pedir un nuevo "baño polaco" para los suecos.
"Llámalo como quieras", dijo el portavoz de prensa de la selección, Jakub Kwiatkowski, dirigiéndose a los aficionados, "pero el encuentro de Sevilla demostró que podemos jugar al fútbol".
Kwiatkowski reveló que el jugador Kamil Glik animó a sus compañeros con una emotiva arenga en el descanso del partido y que él mismo estuvo a punto de recibir una tarjeta por sus continuas protestas hacia un árbitro asistente porque "los nervios estaban a flor de piel".
Polonia, con un solo punto conseguido en dos partidos, ocupa la última posición del grupo E de la Eurocopa, donde está encuadrada junto a España, Eslovaquia y Suecia.
El próximo miércoles Polonia jugará contra Suecia en San Petersburgo y está obligada a ganar.