Estadio Deportivo2 min lecturaMadrid, 30 abr (EFE).- La afición del Real Madrid, que se acaba de proclamar matemáticamente campeón de LaLiga Santander 2021/22, ha comenzado a concentrarse alrededor de La Cibeles nada más concluir el partido ante el Espanyol a la espera de que la plantilla acuda a celebrar el título junto a ellos.
El escenario habitual de la celebración de los títulos del club blanco se ha convertido en un hervidero de hinchas instantes después de concluir el encuentro en el Santiago Bernabéu, en el que el cuadro del italiano Carlo Ancelotti necesitaba tan solo un punto para amarrar la trigésima quinta corona liguera.
Mientras que en el Bernabéu el equipo festejaba junto a los aficionados que habían llenado el coliseo blanco, las calles que dan acceso a la fuente de La Cibeles, completamente vallada, se han convertido en una riada de público que busca sitio para ubicarse lo mejor posible.
Hace dos temporadas el Real Madrid no pudo celebrar la consecución del trigésimo cuarto título liguero por la pandemia. Las ganas de seguidores y jugadores, como reconocieron estos en el mismo césped del Bernabéu de acudir a Cibeles, son superiores incluso a otras ocasiones.
No obstante, la plantilla tendrá que controlarse en la celebración a la vista del trascendental encuentro del miércoles ante el Manchester City, correspondiente a la vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones, en el que tendrá que remontar el 4-3 que encajó en el Etihad.
Los jugadores y el cuerpo técnico del Real Madrid tienen previsto, una vez acabe su celebración en el Bernabéu, tomar el tradicional autobús descapotable y acudir a La Cibeles para celebrar junto a la afición el título y, de manos de los capitanes Karim Benzema y Marcelo, enfundar a la diosa con una bufanda del equipo, un gesto convertido ya en un rito.