Hace unos años Parejo estaba más fuera que dentro del Valencia. Unai se fiaba más de Banega hasta para tirar faltas, aunque la grada le quería titular. La noche que triplicó la tasa de alcoholemia estaba "jodido". Poco después, su ex ´desnudaba´ en Interviú los detalles de su relación de manera más que metafórica: el control de sus padres, su hermana... La misma que en redes sociales prefería que perdiera el Valencia antes de ver a Dani suplente. Recién renovado como crack, valorado en 50 millones por la cláusula, el excapitán che entiende que su negocio ahora está en Sevilla donde el arroz no se pasa. Y estaba todo encaminado hasta que en Mestalla temieron por su culo y dirigieron el foco hacia el jugador. El ídolo convertido en enemigo. Banega, Emery, Palop... El caladero sevillista está en el Turia, donde matarían por la mitad de los éxitos ajenos de la última década. Por eso la presidenta Layhoon Chan le confesó a Mao: "Dani, a cualquier sitio menos a Sevilla". Les correrían a gorrazos. Y es que en fútbol hay mucho cuento chino.
Eduardo Gil1 min lectura