Nadie le va a arrebatar al Real Betis y a su afición el estallido de euforia por la victoria histórica del pasado miércoles en el Santiago Bernabéu, pero para que no se trate de una alegría puntual esta hazaña necesita que esta noche se le otorgue continuidad para confirmar el buen camino tomado por este proyecto.
Setién ha pedido mantener los pies en el suelo y no habría mejor manera de demostrarlo que exhibiendo contra el Levante la misma concentración e intensidad que contra el Madrid, siempre fiel al estilo y con la certeza de que, realmente, los tres puntos de hoy valen exactamente lo mismo que los de Chamartín y que, además, brindan más credibilidad si cabe. Partidos como éste miden la fiabilidad de los equipos y ofrecen la verdadera medida, la que se elevó en Madrid y hoy tiene la oportunidad de confirmar.
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