La modelo
Reeva Steenkamp estaba en posición de defensa cuando recibió el último disparo de su novio, según el testimonio de Mangena, perito de la investigación. Apunta además que el último de los cuatro disparos con los que Pistorius acabó con la vida de su novia pasó a través de su mano izquierda, antes de impactar en la parte derecha de su cabeza.
Oscar Pistorius, de 27 años, ha reconocido haber matado a tiros a Steenkamp a través de la puerta cerrada del baño de su domicilio de
Pretoria, pero sostiene que actúo de esa manera porque pensó que se trataba de un intruso.
La joven "tenía las manos cruzadas, con la izquierda cubriendo la parte derecha de su cabeza y la (mano) derecha cubriendo la izquierda", señaló Mangena en la sesión de hoy del juicio, que comenzó el pasado 3 de marzo en el
Tribunal Superior de Pretoria y es televisado en directo por la televisión sudafricana
eNCA.
Según el testimonio de
Mangena, el último de los cuatro disparos con los que Pistorius acabó con la vida de su novia pasó a través de la mano izquierda de la modelo, antes de impactar en la parte derecha de su cabeza. Steenkamp, que entonces tenía 29 años, estaba de pie detrás de la puerta cuando el corredor disparó la primera bala, que le alcanzó en la cadera provocando su caída. Sentada e incapaz de mantenerse en pie,
Steenkamp adoptó una posición defensiva, con los brazos frente al pecho y las manos en la cabeza, explicó Mangena.
Mangena declaró asimismo que lo más probable es que Pistorius -que tiene las dos piernas amputadas- caminara sobre sus muñones y sin las prótesis puestas cuando disparó, un hecho en el que coinciden la defensa y la Fiscalía.
Además de estar acusado del asesinato de Steenkamp, Pistorius responde en este juicio a otros tres cargos, dos de ellos por disparar pistolas en lugares públicos y otro por tenencia ilegal de munición.
El cuerpo sin vida de
Reeva Steenkamp apareció con varios disparos el 14 de febrero del año pasado en la vivienda de Pistorius en la capital sudafricana.
El atleta -que se convirtió en los
Juegos de Londres de 2012 en el primero con las dos piernas amputadas en competir en unas Olimpiadas- asegura que abrió fuego contra su pareja al pensar que lo hacía con un intruso que se había colado en la vivienda.
De ser declarado culpable en el juicio, que está previsto que dure hasta el 4 de abril, el velocista podría ser condenado a cadena perpetua.