San Antonio Spurs se hizo esta pasada madrugada con el primer partido de las
Finales de la NBA tras derrotar por 110-95 a
Miami Heat, en un encuentro marcado por el tremendo calor que reinó en el
AT&T
Center y por los problemas físicos que sufrió la estrella visitante,
LeBron James, que no pudo acabar un primer choque dominado por los actuales campeones hasta la reacción local en el tramo final.
Un fallo eléctrico dejó sin aire acondicionado al pabellón texano, por lo que la alta temperatura se convirtió para ambos finalistas en otro duro enemigo a batir. Bajo el canto de 'Beat the Heat' ('Gana a los Heat' o en este caso también 'Gana al calor'), los de
Gregg Popovich sudaron de lo lindo para no perder el factor cancha, aprovechando en buena medida cuando '
King'
James tuvo que dejar el partido totalmente 'fundido'.
El estelar alero estaba liderando a los de
Erik Spoesltra, que tras un sólido tercer cuarto, tomaron el mando del primer capítulo de la serie y que amenaban con hacerse con el primer triunfo, de doble valor. Con los
Heat dominando con cierta claridad (79-86) tras una jugada de cuatro puntos de
Chris Bosh,
James tuvo que dejar la cancha con calambres y los
Spurs no lo desaprovecharon.
Los locales, condenados hasta entonces por sus numerosas pérdidas, apretaron atrás y afinaron la puntería para firmar un parcial de 15-4 que dio la vuelta al marcador ante al algarabía del público.
LeBron James volvió a la pista, pero tras poner en una penetración el 94-92, no pudo bajar a defender y puso fin a su participación en el choque con cuatro minutos por jugar.
Miami no pudo sobrevivir a la baja de su mejor jugador y fue arrollado entonces por su rival, que anotó hasta seis triples en el último cuarto, mientras que los actuales campeones sólo pudieron hacer sin James, cuyos problemas físicos no le impedirán jugar el siguiente partido, tres puntos más.
Con todo, '
King'
James terminó el partido, en el que sólo jugó 33 minutos, con 25 puntos y como máximo anotador, respaldado por
Chris Bosh (19) y
Dwyane Wade (18). En los
Spurs, arrolladores en el rebote (39-29) y con 13/25 desde el triple, el veterano
Tim Duncan fue el mejor con otro 'doble-doble' más en su carrera (21 y 10).
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