François Gabart: "Sueño con dar la vuelta al mundo a vela en una semana"

El navegante François Gabart pulverizó el pasado 17 de diciembre, a bordo del maxitrimarán 'Macif', el récord de la vuelta al mundo a vela en solitario con una marca de 42 días, 16 horas, 40 minutos y 35 segundos. Ahora, sueña con volver a completar esa hazaña en una semana, según desvela en una entrevista con Efe.

Gabart, una de las estrellas emergentes del deporte francés, mejoró en casi una semana de tiempo el anterior récord, en poder de Thomas Coville desde solo un año antes.

El navegante francés se encuentra en Bilbao invitado por el 'Sail in Festival', una muestra pionera a nivel mundial enfocada a la difusión de pasado, presente y futuro de la navegación a vela. El galo asistirá al estreno mundial de dos documentales -'Retrato de un campeón' y 'La historia de un récord'- que narran los pormenores de su hazaña.

El 'skipper' destaca "la auténtica revolución" que está viviendo el mundo de la vela y avanza que, gracias a esos avances tecnológicos cabría incluso la posibilidad en el futuro de circunnavegar el planeta "en una semana". "¿Por qué no? No hay límites", asegura.

Pregunta: ¿Era su objetivo lograr ese récord?

Respuesta: No, para nada. Pensaba que era prácticamente imposible, aunque existía una pequeña posibilidad y nos aferramos a ella. Antes de zarpar pensaba que si lo mejoraba, aunque fuera por minutos, sería genial, pero hubo muchos factores que se combinaron. Uno de ellos la suerte y otro una muy buena meteorología en los Mares del Sur.

P: ¿Qué supone para usted haberlo logrado?

R: Un gran orgullo. Llevábamos cinco años con este proyecto del 'Macif' y no sabíamos cómo íbamos a navegar con un barco tan grande -30 metros de eslora, 21 metros de manga y 14,5 toneladas de desplazamiento- y si iba a ser capaz de dar la vuelta al mundo. Y sí hemos sido capaces y además muy rápido. Ha sido un gran placer y estamos muy orgullosos.

P: ¿En qué se diferencia su barco de los anteriores?

R: Estamos asistiendo a una auténtica revolución en el mundo de la vela. Los barcos empiezan a volar. El 'Macif' se ha posicionado en esa fase de transición de los barcos, es algo revolucionario. Cuando empezamos a diseñarlo en 2013 el tema de los vuelos estaba balbuceando. Ahora es mucho más aéreo que los anteriores. Esa es la diferencia, la capacidad de los 'foils' que levantan el barco y te dejan ir muy rápido.

P: ¿Como se reparte la influencia de la tecnología, de la pericia del navegante y de la suerte para alcanzar una marca como la que logró?

R: Un tercio de cada. Es evidente que hace falta un muy buen barco y un equipo que trabaje bien y que innove. Luego, hay que navegar bien, ese es mi trabajo. Hacer buenas trayectorias o cambiar rápido las velas. Y además, suerte. Desde hace unos años parece que tengo una estrella sobre la cabeza que me sonríe.

P: ¿Y la fortaleza mental?

R: A nivel de cabeza es muy difícil porque no se duerme mucho y entonces tus emociones se exacerban. En los momentos difíciles, cuando te hundes, hay que hacer que el barco salga adelante.

P: A lo largo de 27.860 millas náuticas de navegación (51.625 kilómetros), ¿cuál fue el momento más complicado de la travesía?

R: Paradójicamente, el momento más difícil fue tomar la decisión de marcharte. Vas a dejar a tu familia, amigos y te vas a la otra punta del mundo en un barco que va muy rápido. No me imaginaba que iba a ser tan difícil decidir zarpar y dejar tierra. Fue muy duro, muy intenso. Pero estoy orgulloso de haberla tomado.

P: ¿Y se llega a disfrutar?

R: Ha habido otras decisiones y momentos difíciles durante la travesía, pero a pesar de eso hay que disfrutar. Me lo he pasado muy bien porque este trimarán va a mas de 30 nudos y aunque es duro, incomodo y arriesgado da muchísimo placer hacerlo.

P: Ha destrozado la anterior marca en casi una semana. ¿Dónde esta el límite?

R: No hay limites. Un día haremos la vuelta al mundo en una semana. No sé si dentro de 5, 10 ó 50 años. No hay ningún motivo para ponerse límites porque se está progresando. Cada vez se hacen mejores barcos. Sueño con dar la vuelta mundo en una semana. ¿Por qué no? La revolución técnica que estamos viviendo es tremenda. Desde hace unos años el tema físico es distinto porque te apoyas en el agua gracias a estos 'foils' y casi vuelas. El gran reto es saber cómo van a ser los barcos dentro de 10 ó 20 años. Eso no lo sabemos, pero sí que van a ir mucho más rápido. Soy muy optimista en cuanto a la capacidad del ser humano para progresar. Creo que vamos a hacer cosas extraordinarias en este ámbito.

P: Llaman la atención sus logros siendo tan joven en un deporte en el que la experiencia es un grado importante. En 2013, con solo 29 años, ganó la Vendee Globe -la vuelta al mundo en solitario sin escalas-, también con récord incluido, y con 34 ha logrado este impresionante hito.

R: He tenido la suerte de avanzar muy rápido y de conocer a marinos de muchísima experiencia con los que he podido progresar, como Michel Desjoyeaux, que me han permitido compensar mi falta de experiencia. La vela es un deporte que se basa en la experiencia. De mayor tienes menos forma física y mas experiencia y de joven es al revés. Hay que encontrar un equilibrio entre las dos.

P: Casi todos los grandes navegantes oceánicos de las últimas décadas son franceses ¿Por qué?

R: Desde hace varios años se ha desarrollado en Francia una cultura en torno a la vela. Le debemos mucho a Éric Tabarly, que ganó las grandes regatas en los años 70 y popularizó este deporte. El publico francés se ha enamorado de estas grandes regatas en solitario. Los patrocinadores también se han interesado y se han especializado las industrias. Yo aprendí con Desjoyeaux y se ha ido retroalimentando. Es un microcosmos que funciona bien. Estas grandes regatas son historias universales, alguien que se va solo a atravesar el océano. En los próximos años habrá muchos más países que se interesen por este deporte y un público más universal.

P: ¿Conocía el 'Sail in Festival'?

R: Hace años oí hablar de él, pero nunca he estado disponible por las fechas. Solo me hablaban bien, que está genial y hay muy buen ambiente y buena energía. Estoy encantado de descubrir nuevos marineros, ver películas y sentir este ambiente.