Desvelado por este periódico el pasado 15 de mayo, el interés del
Betis por
José Antonio Ríos podría estar cerca de cristalizar, según apuntaron fuentes del entorno del carrilero zurdo, aunque el interesado no estaba al tanto del avance en las negociaciones. Así, el de
Castilblanco de
Los Arroyos atendía amablemente la llamada de ESTADIO Deportivo durante su viaje de regreso desde tierras burgalesas para iniciar sus vacaciones en tierras sevillanas para aclarar que espera noticias, dejando claro que la posibilidad de vestir la camiseta de las trece barras le agradaría sobremanera.
"No he hablado con nadie del
Betis ni mi representante me ha dicho tampoco que negocie mi fichaje. En cualquier caso, sería una gran opción para mí, por supuesto, ya que se trata de un grande de
España que, circunstancialmente, está en
Segunda, aunque va a luchar por subir este año. Vamos, yo creo que sube seguro", asevera el zaguero, que opera oficialmente como agente libre. Y es que, pese a que las primeras informaciones hablaban de una cesión desde el
Real Madrid Castilla al
Mirandés,
Ríos terminó contrato con los merengues el verano pasado, comprometiéndose por dos temporadas con los rojillos. Eso sí, el descenso a
Segunda B de la escuadra adiestrada por
Carlos Terrazas le libera de todo compromiso. Quedó aclarado en la reunión que mantuvo ayer en las instalaciones de
Anduva con los rectores burgaleses, que le agradecieron su participación en la temporada y le desearon buena suerte en el futuro.
Además, el zurdo pretende dejar claro que su pasado nervionense no debe convertirse en un impedimento para que recale en
Heliópolis, ya que sus orígenes se decantan, precisamente, por el equipo que ahora le pretende. Cuestionado acerca de si conoce que las declaraciones de
Raúl Navas al respecto de sus colores le cerraron las puertas del
Betis,
Ríos no alberga dudas: "¿Sevillista yo? Por mis venas lo que corre es sangre verde (risas). Si me preguntan, creo que se me abrirán las puertas de par en par. Estuve en la cantera del eterno rival porque me ficharon de pequeño. Y me trataron muy bien. Me formaron, como ocurrió con el
Real Madrid, aunque eso no quiere decir nada. Soy un profesional, pero, si hay que ser concretos, de pequeño siempre fui bético. Me tiraban más esos colores, supongo que por ascendencia familiar. Me alegro de que me lo pregunte, porque no me gustaría que se guiaran por mi pasado a la hora de decidir".