El verano pasado, además de para tapar más de un prominente agujero en las arcas del club, el dinero recaudado con las millonarias ventas de
Negredo,
Navas,
Kondogbia y
Medel fueron para contratar gol. Llegaron
Bacca,
Gameiro y
Rusescu por un montante de unos 17 millones, una inversión mayor que las realizadas en defensa y en la medular. Este año, sin embargo, es la zona ancha del campo la que requiere que
Monchi centre todos sus esfuerzos. Ya no sólo por la necesidad de encontrar al timón del
Sevilla 2014/2015, tras la marcha de
Ivan Rakitic al
Barça, sino porque va a ser necesario fichar a toda una tripulación para la sala de máquinas blanquirroja. La portería, donde
Beto y
Varas están a un año de acabar contrato; la defensa, en la que puede volver
Botía; y la delantera, donde
Carlos Fernández seguirá teniendo minutos, sólo necesitarán algún mínimo retoque.
Sin embargo, el centro del campo será casi totalmente distinto al del equipo que se proclamó campeón de la
Europa League. Y es que la ausencia de
Rakitic no será ni mucho menos la única que tenga que paliar el subdirector general deportivo y principal responsable de la dirección deportiva, quien también debe encontrar a un pivote defensivo que ocupe el puesto del cedido
M’Bia y a alguien capaz de rendir en las dos posiciones, como hizo el croata la pasada campaña y labor que las lesiones han impedido desempeñar a un
Piotr Trochowski; quien también tiene ya los días contados en Eduardo Dato. Sin ellos tres,
Unai Emery se quedará sólo con el polivalente
Carriço e
Iborra, amén del ahora lesionado
Cristóforo, quien podría buscar una cesión para foguearse cuando se recupere de su grave dolencia en una rodilla. Así las cosas, es normal que la entidad sondee ya numerosas opciones como las de
Carmona,
Stambouli,
Amalfitano,
Dzemaili,
Brozovic,
Lucas Romero o
Fausto Rossi, entre otras.
No obstante, no acaba aquí la cosa, pues a las carencias en la zonas de destrucción y de creación de juego se unirán también numerosas ausencias en las bandas y en la zona de tres cuartos de campo.
Cheryshev y
Marko Marin finalizan sus respectivas cesiones y tanto
Diego Perotti como
Rabello no tienen sitio en este
Sevilla y volverán a salir. Cuatro bajas seguras a las que se unen la incertidumbre de otros como
Jairo y
Reyes, cuyo papel en el equipo del próximo curso, y por lo tanto también su futuro, están aún por resolver.
De momento, los dos únicos refuerzos anunciados ya por la entidad son ‘trescuartistas’: el extremo
Aleix Vidal y el mediapunta
Denis Suárez, quien también puede caer a banda. Y aún se espera alguno más mediático, como
Tadic o
Tello. El verano pasado, el
Sevilla inició un proyecto fijado a tres años y, en el primero de ellos, ya contó con 13 fichajes y con más de 20 salidas. El segundo capítulo de la creación de este ‘nuevo ciclo’ continuará con un mínimo de 16 salidas y un buen puñado de contrataciones. La gran mayoría, de centrocampistas.