En una de las bandas del estadio de
El Madrigal, feudo que visitará mañana el
Sevilla, luce desde hace tiempo una pancarta en la que se puede leer ‘Marcelino nos lleva por buen camino’.
Y a esa afirmación no le falta ni una pizca de razón, pues el asturiano llegó al
Villarreal en la 12/13, en Segunda y tras pasar un año sabático para olvidar su mala experiencia en Nervión. En su primer año en el ‘
Submarino’ logró ascender a Primera división, en el segundo se clasificó para jugar competiciones europeas, en el tercero volvió a quedar entre los seis primeros y en el cuarto, el presente curso, llegó a iniciar la Liga como líder y lleva ritmo de ocupar puestos continentales en mayo.
No obstante, entre las pocas cosas que todavía no ha logrado conseguir el entrenador de Careñes al frente del conjunto amarillo está la de derrotar al
Sevilla, en general, y a
Unai Emery, a nivel particular.
El calendario de la temporada pasada quiso que castellonenses y nervionenses se midiesen en cuatro ocasiones y las cuatro cayeron del lado blanquirrojo: dos victorias en la Liga (2-1 en el Sánchez Pizjuán y 0-2 en El Madrigal) y otros dos en la eliminatoria de octavos de final de la Europa League (1-3 y 2-1).
La historia se repitió el curso anterior, cuando cayó en casa (1-2) y no pudo pasar del empate en Eduardo Dato (0-0).
Marcelino no derrota a
Emery desde el 24 de septiembre de 2011, cuando se impuso con ‘su
Sevilla’ al
Valencia de Unai (1-0). Más tiempo aún hace que no sabe lo que es ganar al cuadro nervionense, concretamente, en un Racing-Sevilla (3-2) de febrero de ese mismo 2011, con ‘show’ en el palco del presidente indio que tuvieron los cántabros.
El balance total de ‘
Marce’ ante el que fuera su equipo es poco alentador. La mencionada victoria de la 10/11, el empate de hace dos cursos y la friolera de 10 derrotas encajadas con todos sus equipos: Recreativo, Zaragoza, Racing y Villarreal.