El peso de Emery en la planificación

Estos días de ajetreo han levantado dudas alrededor del Sevilla. En la directiva, en la afición y también en los que aún no pertenecen al club pero están cerca. En la reunión del consejo del pasado lunes Monchi puso sobre la mesa los nombres en cuyas negociaciones ha avanzado. Dennis Praet, Ben Yedder, Kiyotake o Lucas Pérez entre otros. Son gestiones que requieren el último visto bueno antes de ejecutarlas.

ESTADIO ha querido pulsar la opinión de las personas con las que ha tratado Monchi estos fichajes y todas inciden en que la decisión del director deportivo no hubiera variado la decisión final de sus pupilos, aunque evidentemente el de San Fernando es el mejor interlocutor posible, entienden que se unen a la entidad no a la persona que rige los destinos deportivos del equipo desde hace 16 años.

Más interés mostraban acerca de la figura de Unai Emery. Un cambio en el banquillo sí que podría hacer variar la decisión de alguno de los jugadores que están en cartera. "Gozar con la confianza del director deportivo es importante, pero para un jugador cuenta mucho que el entrenador dé su visto bueno porque al final es el que lo pone y lo quita", explica una de estas fuentes.

Y es que si Monchi es el Rey Midas de los despachos, Emery lo es en el banquillo. El técnico también es artífice de la revalorización de la plantilla nervionense, algo que también saben los futbolistas que van a venir.

Es el caso, por ejemplo de Dennis Praet. Su padre y agente, Herman, estuvo en Basilea invitado por el club para presenciar la final y comprobó ‘in situ’ el buen ambiente que hay entre todos los estamentos de la entidad. También la unión que hay en el vestuario y en torno la figura del entrenador, al que concede mucha importancia. Con todo, espera que sea Monchi el que cierre la operación. "La semana que viene nos sentaremos con el Anderlecht. Espero que esté allí", afirma.