Sevilla FC-Málaga CF (2-0): Para Berizzo, las segundas partes siempre fueron buenas

Era la sexta jornada consecutiva en la que el Sevilla se quedaba sin marcar en la primera parte y, a la postre, ha sido la quinta victoria en Liga del equipo de Berizzo. Sea porque al final los rivales acaban cediendo al empuje nervionense, sea porque el 'Toto' siempre deja en el banco mucho talento, para su equipo la segundas partes siempre son buenas. Ante un Málaga supeordenado, fue entrar Éver Banega y acabarse la película. 

Las rotaciones no tienen una ciencia exacta. El técnico de turno, se supone, valora los estados de forma, los rivales y el calendario, y a partir de ahí decide. Fuese cual fuese, la fórmula de Berizzo propició que se quedaran fuera de inicio a jugadores de un enorme talento, como N’Zonzi, Sarabia, Nolito, Ben Yedder o el propio Banega, futbolistas a los que cualquier sevillista considera titulares. Ni siquiera estaba en el once Rico. Ante un cuadro malacitano que llegaba a Nervión sin haber ganado y con su técnico, Míchel, en la cuerda floja, su homólogo nervionense estimó que debía ser suficiente con Pizarro, Krohn-Dehli y Franco Vázquez en la zona ancha y Muriel en punta. Por la idea de ser muy vertical en los tres cuartos, lo de Navas y Correa tenía su lógica.

Biri-Biri y unos animosos 500 aficionados blanquiazules le pusieron salsa a los prolegómenos de un partido que comenzó cuando el mercurio marcaba cerca de 35 grados, quedando claro que a Tebas le importa más que alguien insulte a que le pueda dar un 'amarillo'. Para el Malaga, no obstante, lo malo no sería el calor, sino el chaparrón que le cayó encima nada más echar a rodar el balón: el Sevilla salió muy fuerte, agresivo y directo, y Navas ya pudo marcar a los pocos segundos, tras una buena aparición de Pizarro. Míchel trató de blindar a su equipo con una suerte de 5-3-2, con Ricca como central zurdo y dándole a Juankar toda la banda, una medida aparentemente lógica en el segundo equipo más goleado de LaLiga.

Rolán, quién no, tuvo la primera para los visitantes, tras un error de Krohn-Dehli. No marcó porque se la quitó Lenglet, uno que nunca debería rotar, dé lo que dé como resultado la fórmula de Berizzo. Respondió Muriel, después de que Correa trazase una gran diagonal y se la dejase perfecta para disparar. Y disparar, disparó, pero se le fue al lateral de la red. Era la primera clara después de caer siete veces en fuera de juego en apenas 20 minutos, y eso que hacer el ‘offside’ es más complicado con cinco. La cuestión es que a Míchel se le fastidió el invento con la lesión de Ricca. Metió a Juanpi, pasó a 4-1-4-1 y lo ajustó en un ‘cooling-break’ (tiempo para hidratarse) más necesario que nunca.

Hasta el descanso, el panorama no cambió mucho: los de Berizzo siguieron empujando y el Málaga, resistiendo sin apenas sufrir. Lo de empujar está bien, pero siempre que se le acompañe de fútbol. No por casualidad, los que más tienen en el Sevilla estaban en el banquillo. Con un disparo de Juanpi, otro de Mercado y uno más de Mula, al que Soria respondió bien, se llegó al descanso.

De la espesura se pasó al correcalles. El Málaga comenzó a creérselo (Recio se fabricó una buena en el 59’) y el Sevilla fue perdiendo fuelle. Berizzo entendió que quizás era mejor tratar de jugar que empujar, y metió a Banega por el Mudo, más voluntarioso que acertado. Y el juego de los blanquirrojos mejoró, claro. Cualquier equipo con Banega mejora. Con Éver, los de Berizzo tocaron más rápido y de lado a lado, y Navas y Correa comenzaron a tener unos contra uno. Al Tucu, que fue el mejor en la primera parte, le derribó Rosales dentro del área en el 68’ y se dio el giro de guion. Marcó Banega y, dos minutos después, Muriel, que no tiene mucha puntería pero que acaba marcando porque se busca con su potencia una infinidad de ocasiones.

Dos tantos en contra eran demasiados para un Málaga sin gol y el Sevilla, de nuevo en la segunda parte y otra vez sin hacer un gran fútbol durante muchos minutos, acabó llevándose los tres puntos: 16 antes del segundo parón.

Ficha técnica:

Sevilla FC: David Soria, Mercado, Kjaer, Lenglet, Escudero, Pizarro, Krohn-Dehli (N’Zonzi, minuto 84), ‘Mudo’ Vázquez (Banega, minuto 57), Jesús Navas, ‘Tucu’ Correa (Nolito, minuto 69) y Luis Muriel.

Málaga CF: Roberto, Rosales, Miguel Torres, Baysse, Ricca (Juanpi, minuto 24), Rolón (Peñaranda, minuto 73), Recio, Mula (Keko, minuto 75), Juankar, Adrián y Diego Rolan.

Goles: 1-0, minuto 68: Banega, de penalti. 2-0, minuto 70: Luis Muriel.

Árbitro: Trujillo Suárez, canario. Cartulinas amarillas para Rolón, Mercado y Kjaer.