La dificultad con Batshuayi

La punta de lanza es una de las parcelas del terreno de juego que la dirección deportiva baraja reforzar este mes de enero, una vez que el Sevilla se haya clasificado para los octavos de Champions y haya quedado emparejado con el Manchester United de Mourinho. Con Muriel desenchufado y un rendimiento lejos de los 21 millones de euros que costó su fichaje (el más caro de la historia del club), el equipo sobrevive gracias a la pegada y el oportunismo de Wissam Ben Yedder, quien, sin embargo, no acaba de encontrar la continuidad que desea sobre el campo, debido al juego de las rotaciones de Eduardo Berizzo.

Óscar Arias maneja diversos nombres, siendo el internacional belga Michy Batshuayi uno de los candidatos, una vez que sólo haya podido acumular 715' con el Chelsea en esta primera mitad de la temporada y quiera asegurarse protagonismo de cara al Mundial de Rusia del próximo año.

En este tiempo, eso sí, ha sumado nueve goles y una asistencia (en 17 participaciones), por lo que son muchas las 'novias' que baraja su agencia de representación, la misma que la de Wissam Ben Yedder. Un aspecto que meses atrás, cuando el Sevilla se interesó en su cesión, supuso una ventaja (el Chelsea, finalmente, frenó su salida) y que ahora, sin embargo, se convertiría en un inconveniente, existiendo dudas en su entorno sobre la idoneidad del Sevilla, habida cuenta de que competiría con su otro representado (Ben Yedder), quien ya de por sí no disfruta de la continuidad que exigen sus goles. Un aspecto, por tanto, a tener en cuenta este enero.