Aquivaldo Mosquera, que militó dos temporadas en el Sevilla, colgó las botas al finalizar el pasado curso, a los 35 años, en las filas del Chiapas de México, país donde desarrolló la mayor parte de su carrera y logró sus mayores éxitos como futbolista, habiéndose proclamado campeón con el Pachuca. “Después de tantos años en activo, ahora estoy disfrutando de mi tierra y de mi familia”, indica a ED el exzaguero, que quiere seguir vinculado al fútbol y tiene previsto viajar a España para formarse: “Estoy valorando mi futuro y pronto viajaré a Madrid para realizar los cursos de director deportivo”.
Mosquera aprovechará para visitar Sevilla, donde dejó “muchos amigos tanto del fútbol como fuere de él”. “Sigo hablando con muchos de ellos y me hace ilusión verlos y presentarles a mi hija pequeña, que aún no la conocen”, relata Mosquera, al que, aunque su experiencia en el césped no resultó satisfactoria, Sevilla le dejó huella.