Si algo levanta pasión en una ciudad cofrade como Sevilla, con permiso del derbi entre Sevilla FC y Real Betis, es la Semana Santa, de ahí que no sea de extrañar las muchas historias que se entrelazan entre las dos mayores pasiones de la inmensa mayoría de los sevillanos.
Una de ellas, sin ir más lejos, es la que recuerda el Área de Historia del Sevilla FC a través de su perfil de Twitter (@AHistoriaSFC). La misma data de 1949, momento en el que el sevillista Antúnez donó a la Hermandad de Los Gitanos el balón de su gran actuación como internacional en un Francia-España disputado en Colombes. Su fin no era otro que el de ser rifado y, con lo recaudado, poder costear la construcción de una capilla en San Román. Memorable.
Alejandro Sáez1 min lectura