Confiesa estar "muy contento por volver a tocar el balón, el césped... a entrenar y a competir" junto a sus compañeros.
Youssef En-Nesyri, parco en palabras como acostumbra, se lo ha puesto difícil a Roberto Arrocha este martes en 'A balón parado', el programa de entrevistas y debate de Sevilla F.C. Televisión. "No me gustan las entrevistas. En el
Leganés creo que di 1-2 y aquí llevaré 3-4, muchas para mí. Allí le decía al de prensa que me quitara de la lista", confiesa el artillero, que recordó algunos detalles de su infancia.
"Salí de casa, de
Fez, a los 12 años para irme a
Rabat, a la
Academia, donde estudiaba y vivía. Es duro si no tienes la cabeza preparada. Mis
padres me preguntaban si iba a ir el fin de semana. Ahora también me lo preguntan (risas). Me fui a Chelsea (Londres) y estuve tres semanas nada más. Me volví para Marruecos; no aguantaba más", recuerda el '15' blanquirrojo, al igual que los pormenores de su llegada a Españ: "Jugué con la Academia aquí contra Málaga, Sevilla y Almería. Me vieron los ojeadores del
Málaga, que vinieron a seguirme cuando ya me volví a
Marruecos. Me ficharon entonces".
Y ahí comenzó poco a poco su carrera, todavía incipiente: "Cuando llegué al Málaga, que era subir de Marruecos a Europa, ya sentí que era diferente. Al llegar a la pretemporada con el primer equipo, el segundo año, sentí que había dado un gran paso. Siempre es complicado alcanzar un sueño. Tienes que trabajar, ser buena gente, conocer a los compañeros rápido y entrar bien al grupo.
No es fácil". El delantero, además, se confiesa muy casero: "Dediqué mi 'hat-trick' al
Betis a mi madre; soy una persona muy familiar. Para mí, la
familia es lo primero. Ellos me dieron confianza para llegar donde estoy, a España
primero y luego para ser
profesional".
El programa le puso un vídeo del meta
Bono, compañero y compatriota, que le dedicó unas bonitas palabras: "No cambies nunca. Eres un tipo humilde y trabajador. Un
orgullo para tu familia. Ojalá puedas estar muchos años en el Sevilla F.C. Tenía dudas de cómo te ibas a adaptar, y gracias a Dios te ha ido genial. Te quiero mucho,
hermano". En-Nesyri le devolvió los halagos: "Es un gran tipo y un gran compañero. Nos conocemos desde los 4 años. Siempre me ha ayudado, en el Sevilla y en otros equipos; también en la selección, diciéndome lo que tenía que hacer y lo que no. Lo quiero como a un hermano".
En un tono más desenfadado, el delantero confesaba que "a veces hacía
siestas de 3-4 horas y no dormía por las noches", así que ahora tiene más cuidado: "He cambiado para dormir por las noches temprano y no por la tarde". Por último, se dirigió brevemente al sevillismo: "
Gracias por seguirme, por apoyarme hasta ahora. Me han ayudado mucho a adaptarme, a meter goles para este gran club".