Monchi, como ya reveló este diario, ha activado la maquinaria
para atar un delantero de cara a la 20/21 en condiciones muy ventajosas, posiblemente con la carta de libertad teniendo en cuenta que la vacante dejada en enero por Carlos Fernández no ha sido cubierta.
El mercado estival de delanteros a coste cero no es demasiado amplio y más si restringe con el margen de acción y de exigencia de un equipo como el
Sevilla.
Factores que han derivado casi de forma inevitable que, aunque tímidamente por ahora,
haya surgido el nombre de Moussa Marega,
relacionado en diversos medios con Nervión sin pasar todavía de la categoría de rumor que responde más a un encaje lógico por el contexto que a certezas. Lo único que no cabe duda es que
el delantero maliense se presenta como una oportunidad mercado, pues, con
un valor de 20 millones de euros según Transfermarkt,
saldrá llibre con casi toda seguridad del Oporto.
Obviamente, el polivalente delantero de 29 años despierta mucho interés en las grandes ligas y la competencia será dura, si bien hay actualmente
se da una circusntancia puntual que podría eliminar rivales para el Sevilla en el caso de que haya un interés real y vivo por él: el africano está atravesando una
sequía realizadora que está lastrando sus números goleadores, camino de ser los peores desde que está en el Oporto.
En su primera campaña completa en 'O Dragao' hizo 23 tantos, el segundo 21 y el tercero 15, y
en el ejercicio actual suma seis en la liga portuguesa más cuatro en el resto de competiciones. El problema radica en que parece que se le ha mojado la pólvora, pues únicamente ha marcado
un gol en los últimos dos meses en la competición liguera a pesar de haber sido titular en todos los partidos menos en uno.
Sequía aliviada con el tanto ante la Juventus en Champions y en la Allianz Cup en enero pero que despierta
cierta preocupación en Oporto, donde precisan de su acierto.
Un bache que puede ser muy oportuno.