Definitivamente, el reencuentro del
Betis con la máxima categoría no ha ido tal y como esperaba la afición. Tras empatar en el debut liguero contra el Villarreal (1-1) y ser goleado por el Real Madrid en el Santiago Bernabéu (5-0), los pupilos de
Pepe Mel sólo han podido sumar un punto de seis posibles, con un balance de un gol a favor y seis en contra que les condena a ser antepenúltimos en la tabla clasificatoria.
Con estos números, el nuevo proyecto heliopolitano ha protagonizado el tercer peor arranque tras subir a Primera, mejorando sólo lo sucedido en las temporadas 79/80 (cero puntos y una diferencia de goles de -6) y 42/43 (también sin estrenar el casillero y con un -8 en la comparativa de tantos anotados y recibidos). En este sentido, cabría precisar que la ´manita´ encajada en Chamartín es la principal causante de este balance, toda vez que en las campañas 90/91, 74/75 y 71/72 el equipo empezó también con un empate y una derrota, pero con mejores ´goal averages´.
No obstante, las prestaciones de la actual plantilla se quedan lejos de las ofrecidas en el último retorno a la elite, en la 11/12 y también con
Pepe Mel en el banquillo, cuando los heliopolitanos arrancaron como un tiro, con sendos triunfos ante Granada y Mallorca. Así, se repitió lo mismo que ocurrió en la 58/59, cuando, tras 14 años sin pisar la máxima categoría, el Betis echó a andar con un 2-1 al Granada y, sobre todo, un 2-4 ante el eterno rival en el primer duelo oficial disputado en el Sánchez Pizjuán.
En cualquier caso, un mal inicio no debe ser tomado jamás como un presagio de lo que puede suceder después. De hecho, en la 79/80 se empezó peor y, al final, los verdiblancos acabaron la Liga quintos.