Entrevista a José Miguel López Catalán

Catalán: "Vamos a estar cerca del 30%... y ganaremos"

Tremendamente optimista, como su socio en la aventura, Ángel Haro, el empresario sevillano está convencido de que la junta les sonreirá y recela de las cifras "irreales" que ´vende´ Castaño.

Catalán: "Vamos a estar cerca del 30%... y ganaremos"
José Miguel López Catalán en la redacción de ESTADIO Deportivo, que visitó a horas del 23-S. - J. Adorna / Ó. Murillo
Joaquín AdornaJoaquín Adorna21 min lectura
Desde fuera, existe la sensación de que el ‘partido’ lo va a ganar Castaño y de que están intentando sumar todos los puntos posibles por si él tropieza y se deja alguno (o Farusa le falla, mejor dicho). ¿La comparte?
- En absoluto. Reconozco que, cuando él hace declaraciones tan rotundas, puede llegarse a esa conclusión, pero lo que percibo es que el beticismo está movilizándose, sumando acciones día a día a ‘Ahora, Betis, ahora’, mientras que para la otra parte son prácticamente nulas, así que estoy totalmente convencido de que vamos a ganar.

- Haro parecía más optimista que usted al principio...
- ¡Qué va! Vamos a la par en eso. Desde el primer día, ya dijimos que teníamos más posibilidades de ganar que de perder, lo que ya era optimismo, pues, al principio, era muy complicado.

- Sin embargo, grupos de accionistas importantes que les apoyan opinan ‘off the record’ que les va a faltar tiempo y que hay un tope, por lo que no van a poder alcanzar a la suma Castaño-Farusa. ¿Se están ofreciendo cifras irreales, entonces?
- Estoy totalmente seguro de que el 29,5-30% del que habla Castaño es totalmente irreal, mientras que nuestros datos sí son reales. Vamos a tener que movilizar a muchísimos béticos y, lógicamente, alguno se nos puede caer, porque no vaya a la junta o porque cambie el sentido del voto. Todo eso puede pasar, aunque es innegable la marea de opinión que está con nosotros. Esa corriente a nuestro favor provoca que gente que estaba indecisa se decante por Ángel y por mí. Sin tenerlo cien por cien seguro, tengo el pleno convencimiento de que lo vamos a conseguir.

- De haber tenido más tiempo para trabajar, ¿serían, incluso, más optimistas?
- Por supuesto. Con un par de semanas más, al ritmo al que vamos, sería absolutamente seguro que ganábamos. Es cierto que hay un techo, por el montón de acciones inactivas que pertenen a personas fallecidas o que fueron concedidas irregularmente. El otro día, en una peña, nos decían que tenían X acciones por sacarse el carnet oro o por una ampliación de capital que había hecho Lopera. Aun contando con eso, estamos llegando a todos, pueblo a pueblo, peña a peña... Y estoy seguro de que vamos a ganar.

- El escenario de la suspensión, ¿lo contemplan? ¿lo prefieren?
-De ninguna manera. Me fastidiaría bastante que se suspendiera la junta. Creo que no se debe dejar de celebrar por nada del mundo. Todo el beticismo está movilizado y convencido de que, ganando esta junta, como creo que vamos a hacer, daremos un salto importante, un impulso grande al club, desarrollando todos esos proyectos que tenemos en mente. No seguimos una línea estrictamente continuista. Simplemente, reconocemos que se han puesto las bases y que ciertas personas que están ya suman. Ahora, sin administración judicial, entendemos que es el momento de crecer. No podemos esperar más. Ni siquiera hasta diciembre.

- Dice que los números de Castaño son irreales. ¿Es porque no se fía del apoyo de Farusa del que tanto presume?
- Nos pasa igual que al resto: Farusa no ha dicho absolutamente nada y, en algunos casos, Manuel Ruiz de Lopera ha demostrado ser imprevisible. Tendremos que confiar en la seguridad con que lo afirma Castaño. Estaría bueno... Sería ya realmente esperpéntico que no tuviera finalmente ese apoyo. Creo que sí va a tener el respaldo de Lopera, con lo que, con ese 24-25%, estarán en un 26, 27 o 28.

- ¿Y Haro y Catalán van a tener un porcentaje mayor?
- Sí, nosotros creemos que más. Vamos a estar cerca del 30 por ciento. Me apuesto una comida contigo (risas).

- Pues a la mayoría no le salen las cuentas...
- De verdad que estamos movilizando a ese ‘electorado’ pasivo del que tanto se habla. Esta mañana, sumamos 300 acciones. Ayer, 400. Vas a una peña y, aparte de las de la propia peña, te traes otras muchas a título individual. Recibimos cartas con hasta cien acciones para nuestra causa. Quedan pocos días, pero contamos con el factor de la última hora. Además, esta junta está creando mucha expectación, por lo que gente que tiene más de diez acciones no nos ha manifestado directamente el apoyo, si bien va a ir y a votar allí. Con ésas no contamos, pero pueden unirse a nosotros. Entiendo que haya dudas, pero no en nosotros, que tenemos seguridad de que se puede conseguir.

- ¿Es cierto que Castaño les ofreció una alianza si se desvinculaban del entorno y que no aceptaron esa mano tendida?
- Es completamente falso. Hay que tener en cuenta que esa única entrevista que mantuvimos, hace casi un mes, fue para conocernos, en un contexto en el que él se había pronunciado contra Bitton diciendo que eran “el lobo” y se habían levantado las medidas cautelares. Quisimos reunirno, pero sin entrar en detalles. Para nada se habló de aliarnos contra Farusa. Y me extraña que diga que nos lo propuso y que luego diga que tiene su apoyo. Entonces, ¿iba a traicionar a Lopera? No tiene sentido; es incoherente. En esa época, además, sólo teníamos una idea vaga de esta campaña, que no estaba lanzada. Le dejamos claro que somos independientes, que no tenemos nada que ver con ese entorno del que habla, por si tenía alguna duda. Por no conocer, ni siquiera conocemos a Galera, por ejemplo. Castaño nos soltó el discurso de siempre, prepotente, amenazando con entrar y echar a mucha gente...

- ¿Entiende, sin embargo, que lo lógico habría sido ese pacto Castaño-Catalán-Haro, aunque se planteara de otra forma? No en vano, son los tres accionistas mayores a título individual.
- Ya dije durante la presentación de nuestro proyecto que contamos con todos los béticos, poniendo ‘todos’ en mayúsculas. Otra cosa son las cuentas con la justicia, de las que cada cual tendrá que responder. Ahí, excluyo a Bitton, incluso en el hipotético caso de que las acciones de Farusa fueran suyas, hecho que nos preocupa. Pero sí incluimos al resto de accionistas béticos, a cualquiera de ellos. Siempre con un consenso, claro. Aspirábamos a eso, como estamos consiguiendo.

- Si ustedes ganan la junta, en su consejo no estará Castaño.
- Así es. Como tampoco nosotros en el suyo si no ganamos. Porque, para ejercer tu representación proporcional en la junta, debes solicitarlo cinco días antes, dejando de contar tus votos en la elección de consejeros. En un momento como éste, con porcentajes tan apretados, cada parte presentará una lista de consejeros, y ganará la más votada. A lo mejor, en otra asamblea posterior, no tenemos opciones de ganar y planteamos tener dos consejeros para, por lo menos, fiscalizar desde dentro.

- Dicen los expertos que, pase lo que pase el 23-S, en diciembre habrá otro cambio en el órgano rector del club.
- Te digo lo que pienso que va a pasar: nosotros vamos a ganar esta junta y pondremos un consejo de personas afines a este proyecto. Trabajaremos a saco para revolucionar el Betis, haciendo todo lo que hace falta. En diciembre, aunque Castaño no va a tener derecho por sí solo a su representación proporcional con su 4,1% (sería siempre unido a Farusa), si quieren tener algún consejero, nosotros estaríamos encantados de que así sea. Contar con opiniones de otra línea de pensamiento es sano para cualquier sociedad.

- Y eso, a medio plazo, ¿no sería apostar por el desgobierno?
-No, porque el gobierno se ejerce desde el consejo de forma colegiada. Si hay siete consejeros de un bando y tres de otro... Se produciría un debate, incluso, enriquecedor.

- En su hipotético consejo, aparte de Juan Carlos Ollero (como presidente), López Catalán y Haro, ¿cuántos más?
- En cuanto al número, por la experiencia que tenemos en nuestras propias empresas y en el Betis (donde he vivido consejos de 7-8 y consejos de 11), entendemos que lo adecuado es entre diez y doce. Menos, como hemos escuchado que propone Castaño, nos parece un error para todo lo que hay que trabajar y todo lo que queremos abarcar. La labor de un consejero en un club de fútbol no es sólo viajar, ir a las peñas o sentarse en el palco, sino colaborar y apoyar en todos los proyectos en marcha. No están decididos todavía sus nombres. Estamos en fase de debate y consenso, buscando las personas adecuadas. Habrá una base conocida, con Juan Carlos Ollero, Ángel Haro y yo, además de alguno posiblemente que esté también ahora y que creamos que aportará mucho. Pero entrarán nuevos miembros a la directiva.

- No todos tendrán por qué ser accionistas, ¿verdad?
- No hay diez o doce accionistas de referencia, quitando inicialmente a Castaño y Farusa. En un consejo, no sólo en el Betis, los accionistas deben tener un peso importante, aunque siempre tienen cabida otros profesionales, como Tomás Solano, un arquitecto que aporta conocimientos para proyectos concretos, como la remodelación del Gol Sur. A cinco días de la junta, aún nos queda dedicar bastante tiempo a la elección de los nombres definitivos, porque, con este lío de la captación de acciones, nos faltan horas del día. Pero iremos el ‘Día D’ con una lista concreta.

- ¿Esperaban este ‘juego sucio’ de los últimos días?
- No nos lo habíamos planteado. Lanzamos la campaña con un estilo diferente y una línea constructiva, sin querer hablar mal de los otros y del pasado, a pesar de que hay motivos para cuestionarles. Tenemos la convicción de estar limpios, de hacer las cosas bien. Hemos demostrado una a una que todas las acusaciones que han hecho son falsas, por lo que son ellos los que quedan mal. Por ejemplo, hace poco dijeron que los materiales de la carpa de captación de acciones se guardan en el parking del estadio, lo que es rotundamente falso. Ya nos cuidaríamos nosotros de hacer uso de las instalaciones del Betis para eso. De mí dicen que me lucré con la web y la ‘app’ del Betis, cuando eso ocurrió dos años antes de yo comprar mis acciones y de entrar en el club. Todo lo hicimos gratis, asumiendo el coste de 60.000 euros, dándome el gusto, como bético, de no cobrar ese trabajo. Pueden ir al club a consultar las cuentas y verán que nunca se ha pagado un solo euro a mi empresa. Es más, cuando entré como consejero, para evitar suspicacias, lo primero que hice fue pasar el mantenimiento a otra empresa, tras el preceptivo concurso; curiosamente, al club ya empezó a costarle dinero, porque nosotros se lo hacíamos gratis. Está lo del envío de cartas a los domicilios, de acuerdo con la ley... Nosotros hacemos las cosas bien. Pero ése es su estilo. No le doy importancia ni me desgasta.

- ¿Esperan una junta tensa?
- Esas juntas que recordamos, que también viví, no pueden ni van a volver a pasar. Ahora, hay otras formas, más educadas y profesionales. Creo que no va a ser así. Será una junta multitudinaria. Si, hasta ahora, iban 100-200 personas de las 800-900 con derecho a acudir, por tener más de diez acciones, quizás nos encontremos con 600. Habrá mucha gente y expectación. Va a ser hasta bonito, aparte de trascendental. Tampoco habrá más que un punto en el orden del día. Llegaremos, se explicará cómo se va a elegir, votaremos... y para casa. Entendemos que va a ser una junta rápida, no de las que duran más allá de las dos de la mañana. Esperamos que nadie vaya con ganas de montar sainetes. La inmensa mayoría, seguro que no.

- ¿Y estará Bitton?
- Más allá de que no son béticos, nos preocupan su historial, sus formas y sus intenciones. Para esta junta, creo que están completamente desactivados, porque la presunta compraventa a Farusa tenía como condición la inscripción en el CSD, lo que no se ha producido. Tampoco me consta que hayan pedido en un juzgado la suspensión de la junta. No contemplo eso. Tiene que haber junta. El Betis necesita que, por primera vez, los béticos puedan elegir su camino. Y lo tenemos a tiro, porque estoy convencido de que ganaremos.

- ¿Percibe la desconfianza de la gente hacia cualquier candidato a regir el club por el pasado?
- También somos béticos. Hasta hace un año y pico, estábamos en la grada, junto a ellos. Por eso, nuestro mensaje y nuestro discurso se están ganando esa confianza. Estamos siendo honestos, y sólo pedimos el apoyo para esta junta, no sindicar las acciones ‘sine die’. Para la de diciembre, las tendríamos que pedir otra vez. Así, hemos solucionado cualquier suspicacia.

- Las encuestas ofrecen a ‘Ahora, Betis, ahora’ un respaldo cercano al 95%. ¿Subidón de moral y/o responsabilidad?
- Sabíamos lo que hacíamos cuando nos comprometimos a cambiar el Betis. Tenemos conocimiento de causa, como ex consejeros, así que, si prometemos algo, es que lo vamos a cumplir. Si no, seríamos tontos. Sería contraproducente. Sentimos tanto la responsabilidad como la confianza por ese respaldo.

- Compiten dos modelos con puntos en común, pero bastante distintos en el fondo.
- La distinción entre cómo planteamos nosotros que se puede terminar el Gol Sur y cómo lo plantea él no me parece de pobres o de ricos, sino que su forma es un poquito arcaica. Si, actualmente, en el fútbol mundial, existe interés de países árabes, China o Estados Unidos por invertir en un fútbol como el nuestro, es desafortunado y erróneo no aceptar ese dinero. Por el contrario, esa cantidad debería salir del bolsillo de los béticos, a los que se pedirá 1.000 euros por cabeza para terminar la grada. No estamos diciendo que vayan a venir unos jeques a quedarse con el Betis, sino todo lo contrario: vendrían a invertir y cubrir los costes de una gran obra. Lo que propone él refleja su incapacidad para buscar soluciones modernas para un Betis grande.

- ¿Por qué usted y Ángel Haro no aspiran, como Castaño, a ser presidentes del Betis?
- Su modelo es presidencialista; el nuestro, de trabajo en equipo. El Betis no necesita un salvador, ni dos en nuestro caso, sino mucha gente buena que se una para conseguir todo lo que se proponga. Aun siendo Juan Carlos Ollero presidente, no queremos un club presidencialista, sino uno con un consejo trabajador y unido en pos del bien común. Entre este modelo y el de Castaño, que se va a ver a Macià para decirle que faltan centrales... Consideramos que su sistema es peor, un error como los de antes. Él tiene 4.900 acciones y yo unos 4.200, pero no es un objetivo para mí ahora ser presidente. La gente se dará cuenta con el tiempo de que sólo pretendo el beneficio del Betis. Y, en estos momentos, entiendo que se necesita un presidente como Ollero, que tiene experiencia, talante y tiempo para dedicar. Tanto Ángel como yo aportamos más en ese trabajo ejecutivo. A mí me gustaría ser presidente del Betis, pero cuando sea mayor. Como bético, es una ilusión, pero a largo plazo.

- ¿Cómo se ve el 24-S?
- En el palco ante el Deportivo, al que, por supuesto, vamos a ganar. Por desgracia, porque a mí me gusta más estar en la grada con mi familia, aunque me tocará asumir mi responsbilidad de representar al Betis. Lo haremos con la ilusión que nos habrán contagiado la noche anterior todos los béticos.

- Se ven ganadores, por tanto. Pero, ¿si gana Castaño?
- Si se da esa hipótesis, desde el 24 por la mañana estaremos trabajando a tope para lanzar de nuevo la campaña y ganarnos otra vez el respaldo de todos los béticos. Nos habríamos quedado muy cerquita de ellos, pero, con total seguridad, para diciembre superíamos ese 30 por ciento. No nos rendiremos nunca. Animo a todo el mundo a que vaya a la carpa que tenemos preparada junto al Villamarín. Son los últimos días, y sabemos que mucha gente lo deja para el final. Una acción nos vale. Si no tienen el título, no hay problema. Con DNI y firma nos vale. Estaremos abiertos también el sábado para dar el empujón que nos falta aún.
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