"Entrenaba tras dormir sólo dos horas", asegura

El durísimo proceso de adaptación de Petros

El centrocampista brasileño del Betis ya está feliz: "Mi corazón me decía Betis, Betis, Betis... Nuestros aficionados, locos de la cabeza como los del Corinthians", afirma en una entrevista en la que destapa su lado más personal.

El durísimo proceso de adaptación de Petros
Petros, jugador del Real Betis, desgrana sus dos meses en Sevilla.
Estadio DeportivoEstadio Deportivo 8 min lectura
El centrocampista brasileño del Real Betis, Petros, ya está feliz: "Mi corazón me decía Betis, Betis, Betis... Nuestros aficionados, locos de la cabeza como los del Corinthians", afirma en una entrevista en la que destapa su lado más personal. No ha sido fácil el proceso de adaptación a un fútbol diferente al brasileño y a una cultura también completamente distinta, pero Petros ya está feliz en Sevilla, "una de las ciudades más bonitas del mundo, con una temperatura magnífica y un clima muy bueno", asegura.

"Hay una diferencia muy grande entre los países sudamericanos y Europa, y no sólo en lo referente al fútbol, también existe una gran diferencia en el aspecto social, cultural y económico. No se trata sólo de deporte. Es un cambio muy grande y no es fácil. No podemos adaptarnos como si nada hubiera pasado porque es una mudanza importante, hablas una lengua diferente, existe una ley diferente... No puede ser igual jugar al fútbol en Brasil o en España", ha explicado Petros en una entrevista en Radio Marca.

"Yo venía de Corinthias y aunque tenía unas ofertas muy importantes de países árabes para ganar mucho más dinero, seguí la decisión de mi corazón. Mi corazón me decía Betis, Betis, Betis. Pero los primeros dos meses han sido muy difíciles porque han implicado un cambio en la forma de jugar, un cambio de muchas características... Antes no conseguía dormir porque existen cinco horas de diferencia. No podía dormir y cuando lo conseguía dormía dos horas y me tenía que ir a entrenar. He entrenado al principio siempre cansado. Ya no. Además los entrenamientos son muy fuertes, tienen que ser así para seguir aprendiendo y para seguir creciendo", ha explicado Petros.

La comida y el lenguaje
A ello ha añadido que "también la comida aquí es diferente. En Brasil como pocas veces pero mucha cantidad. Aquí se comen muchas cosas pequeñas compartidas. Me gusta el sistema de tapas. Yo ya estoy feliz en casa con todo y tengo ganas de hacer una gran temporada con el Real Betis Balompié. Tengo mucha ilusión".

Respecto al lenguaje, Petros se ha expresado con un castellano bastante aceptable: "Es muy importante el idioma porque me ayuda con los compañeros, a comunicarme con el cuerpo técnico, con ustedes los periodistas, y también en la ciudad. Es algo que estoy practicando constantemente y espero seguir mejorando".

La afición y el fútbol del Betis 
Le ha facilitado la labor en su proceso las similitudes que encuentra entre el Betis y el Corinthians: "Yo vengo de un club muy importante que tiene unos 30.000 aficionados que están locos de la cabeza, exactamente igual que los aficionados del Betis. Aquí son más en número, pero son iguales, locos de la cabeza. Una de las razones por las que me decidí por el Betis fue por sus aficionados, ellos son como combustible para mí. Se parecen a los aficionados de Brasil".

Petros ha dado el salto a Europa con 26 años y ya ha disputado 4 partidos de Liga con el Betis en Primera división (164 minutos, exactamente). De ellos, tan sólo uno completo, contra el Deportivo, en el que logró el único gol que ha marcado hasta ahora en la liga española.

Lo que más le ha sorprendido es que el Betis practica un fútbol "muy rápido. Mel quiere que cuando tengamos balón seamos protagonistas, que hagamos triangulaciones... En defensa, que seamos muy fuertes, pero en ataque que seamos protagonistas. El Depor fue muy eficiente contra nosotros. Estuvo muy bien en defensa y salió muy bien al contragolpe". Respecto al fútbol español, "también me gusta como juega el Barcelona o el Madrid, que está batiendo récord de goles".

Su posición y el Betis como club
En cuanto a su posición en el campo, prefiere jugar "como mediocentro con un poco más de libertad, me gusta llegar al contragolpe. El otro día hice pase a Molina y podía haber tirado. Me gusta pillar por sorpresa al equipo contrario y que rompamos su sistema defensivo".

Aunque el Betis ha comenzado bien, Petro asegura que él es "muy sensato, me gusta la humildad porque aprendí mucho en toda mi carrera. Lo más importate ahora es acreditar que podemos, que venceremos y que podemos ser protagonistas. Sabemos que es muy difícil pelear para ser campeón contra Madrid o Barcelona, pero tenemos que hacer un año bueno para permanecer en Primera división, donde el Betis debe estar, para que el próximo año podamos conquistar algo mucho más alto. Así veo yo nuestra situación".

En cuanto a las individualidades, Petros lo tiene claro: "Lo más importante es el equipo. Tenemos grandes talentos como Joaquín, Rubén Castro, Ceballos... pero si estamos bien como equipo, mucho mejor para ellos y para todos. Si jugamos como equipo bien en casa y ganamos, y sacamos puntos fuera de casa, lo individual estará bien también".

El brasileño ha seguido también la situación institucional del Betis y la Junta de Accionistas del pasado 23-S: "La semana pasada hubo una votación importante y se consiguió una victoria importante, porque se confía y la aficón confía en el trabajo que está haciendo la junta directiva. Tenemos la obligación de hacer un buen año, principalmente por nuestros aficionados".

No sólo de fútbol vive Petros
Refiriéndose a sus inquietudes personales, Petros asegura que no sólo se centra en el fútbol, también en conocer la ciudad y en cuál será su dedicación en un futuro, cuando cuelgue las botas: "Me gusta el centro de Sevilla. He intentado conocerlo. Soy muy católico y me encanta el Barrio de Santa Cruz, la Catedral y la Giralda. Es la parte más bonita de la ciudad y siempre que puedo voy para aprender de la cultura de Sevilla. Tenemos que hacer más cosas además de jugar al fútbol. Aquí en Europa se retiran los jugadores a los 35 años. En Brasil, incluso antes. Es una carrera muy corta. Y tenemos que pensar que nuestra vida seguirá después muchos años. Yo he estudiado y sigo estudiando. Me gusta la parte de empresa, de emprendimiento, administrativa. Es algo a lo que me intentará dedicar después de jugar al fútbol".
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