Sergio León, el hijo pródigo del Betis con pedigrí

El Elche ha tenido tres ‘Pichichis’ a lo largo de su dilatada historia: Vavá, que anotó 19 tantos en Primera en la 64/65; Jorge Molina, que hizo 26 en Segunda en la 09/10; y Sergio León, quien, con su diana el sábado en Alcorcón, totalizó 22 para convertirse en líder en solitario de la clasificación de goleadores de la División de Plata. Los dos últimos tienen vinculación con el Betis, que fichó al alcoyano hace seis años para que se erigiera en uno de los futbolistas más relevantes de ese periodo (77 ‘chicharros’, entre ellos el de la clasificación para la Europa League, una veintena de asistencias, papel relevante en los dos ascensos más recientes....), al tiempo que Víctor Fernández hizo debutar al palmeño con el primer equipo heliopolitano en 2010, tras destacar en su filial.

La pasada semana, durante una entrevista, León expresaba su deseo de estrenarse al fin en la elite nacional, pues, aunque tiene contrato con los franjiverdes hasta 2017, cuenta con una cláusula de dos millones de euros que se antoja asequible a tenor de su rendimiento. Y, si fuera posible, a Sergio le gustaría que fuese en el Betis para quitarse la espinita y cumplir con la promesa que le hizo a su padre antes de fallecer. Pero, de momento, no hay indicios de que vaya a poder cumplir con su objetivo. Así lo confirma a ESTADIO su representante, Joaquín Vigueras, quien deja claro que, de momento, “nadie del club verdiblanco se ha puesto en contacto” con ellos para tratar su fichaje.

De todas formas, la competición en Segunda todavía no ha terminado, pues restan los ‘play off’, por lo que los movimientos pueden producirse en las próximas semanas. Porque es una tónica habitual que en La Palmera miren a los artilleros más reputados para tratar de repetir la exitosa ‘fórmula Molina’. Javi Guerra y Geijo fueron tentados sin suerte durante el verano de 2011, mientras que, un año más tarde, volvió a sondear al de Vélez-Málaga, al tiempo que se fijó en un Leo Ulloa al que no pudo sacar del Almería. Oriol Riera, autor de 18 dianas en el Alcorcón durante la 12/13, estuvo sobre la mesa del director deportivo del Betis, pero Osasuna apostó más por el de Vic, abonando 700.000 euros al conjunto alfarero. Charles, ‘Pichichi’ de aquella temporada, también sonó, aunque con menor fuerza, en parte porque el Celta puso el millón de euros necesario para reclutarlo.

Ya tras la 13/14, el Athletic convenció rápidamente al Alavés para llevarse al máximo anotador de Plata, Borja Viguera, que fue requerido en forma de cesión en las siguientes ventanas del mercado, habida cuenta de las pocas opciones de que disfrutó como rojiblanco, mientras que Kike García (23 goles en el Murcia de Velázquez) prefirió la Championship. Araujo y Borja Bastón también gustaban hace un año para el regreso a Primera.