Pese a las reducidas dimensiones de
Ipurúa -no hay un escenario más corto ni estrecho que sus 103x65 en la elite del fútbol español-, estadio que visitará el
Betis el próximo viernes 25 de noviembre (20:45 horas, televisado por Gol), se antoja un escenario ideal para dar continuidad al 1-5-3-2 dispuesto por
Víctor Sánchez del Amo en su estreno como responsable heliopolitano.
Y es que el
Eibar destaca en las estadísticas de balones colgados al área y de pases en largo, con lo que la acumulación de hombres por dentro, con tres centrales y dos pivotes defensivos (el altísimo
Donk entre ellos) puede resultar muy interesante para seguir sumando. De hecho, el único equipo que ha ganado hasta la fecha en el vetusto campo guipuzcoano fue
Osasuna, precisamente con una línea de cinco atrás. Por lo demás, cuatro triunfos armeros y un empate en seis compromisos como local de la escuadra que adiestra
José Luis Mendilibar.
Aparte de los navarros, también el
Celta intentó este fin de semana sin suerte oponer resistencia con tres centrales y dos carrileros largos, al tiempo que usaron una línea de cuatro atrás
Valencia (que sí venció el año pasado allí con la variación referida de su esquema habitual),
Sevilla (el otro que rascó algo en la 16/17, aparte de Osasuna),
Real Sociedad y
Villarreal, la mayoría sin premio.
El preparador madrileño del
Betis, con todo, prefirió no dar pistas tras la victoria ante
Las Palmas, como ocurrió en la rueda de prensa de la víspera, acerca de sus planes para la visita al Eibar. "Nosotros no le vamos a dar ninguna pista al próximo rival. Ya he comentado que queremos tener un equipo que sea versátil, que se pueda manejar en diferentes sistemas. Tenemos jugadores inteligentes para desarrollarlo. Es cuestión de trabajo, generar mecanismos y, a partir de ahí, crecer", sentenciaba al respecto un
Víctor Sánchez del Amo que desea ganar crédito.