Los cuadritos de Excel

Hasta que José Antonio Bosch no entró en esto del fútbol no había relacionado las hojas de cálculo con los clubes de fútbol. El popular Excel que manejan casi todas las empresas fue ajeno al mundo del fútbol durante mucho tiempo. De aquellos polvos, los lodos que afectan hoy al deporte rey. Los concursos de acreedores y las amenazas de descenso administrativo que hoy penden sobre algunas instituciones históricas.


Monchi, que es mitad hombre de fútbol mitad de despacho, también nos habló el otro día de las famosas celdas de Excel, esas que cuadran las cuentas e impiden desmanes que después tienen difícil solución. El gaditano reconocía haberse obsesionado con determinados futbolistas que pagó a precios fuera de mercado, por utilizar la famosa expresión acuñada en Nervión, y que después ofrecieron un rendimiento inversamente proporcional a la inversión realizada. Eran tiempos en los que se apostaba a la clasificación para la Champions para arreglar desajustes financieros.


En la negociación por Krychowiak se aprecia el cambio. Cuando hay un límite para comprar incluyendo traspaso y ficha, lo normal es que todos aprieten hacia el mismo sitio para conseguir el mayor beneficio. El polaco era consciente de que cuanto más pagara el Sevilla, menos percibiría él por las cuatro temporadas por las que se había comprometido con los nervionenses. Al final hasta tuvo que renunciar a 150.000 euros que le correspondían del traspaso para desbloquear las negociaciones.


Como el Sevilla hay 18 equipos en Primera. A los otros dos lo único que les preocupa de los cuadritos de Excel es que quepan los ceros suficientes.