Antonio Albacete (Cepsa Truck Team) tuvo un mal día este sábado en el Gran Premio de Hungría, donde un golpe de otro participante le obligó a abandonar en la primera carrera y en la segunda, con el
camión dañado, se tuvo que conformar con la novena plaza.
El piloto español, que estaba cuajando una buena labor en Hungaroring al ser de los más rápidos en los entrenamientos -tercero en la superpole-, afrontaba la primera prueba con ilusiones de podio.
Pero sus ilusiones se fueron al traste en la primera carrera, cuando en la curva cuatro recibió un golpe lateral del alemán Rene Reinert. Albacete tuvo que hacer un giro completo de 360 grados, y cuando intentaba volver comprobó que el motor se había quedado sin presión de aceite y tuvo que retirarse.
La acción de Reinert fue sancionada de inmediato por dirección de carrera con treinta segundos de retraso en la clasificación y la victoria en esta carrera inicial fue clara para Norbert Kiss en su tierra.
En la segunda manga dominó por completo Stephanie Halm, que subió al podio junto a Vrsecky y Kiss. Albacete finalizó noveno con el camión en malas condiciones.
"Llevamos una temporada muy dura y desde luego no nos merecíamos algo así. No sé muy bien lo que intentaba hacer este hombre, yo he frenado al llegar a la curva, lo justo y por el sitio, y él no ha frenado y me ha embestido", explicó el español.
"El camión está bien, me asusté por la alarmas de pérdida de presión de aceite, pero el motor está bien. De todas formas no podía continuar, porque la defensa lateral me la había destrozado y estaba presionando la rueda delantera. A ver si mañana tengo más suerte", apuntó.
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