La
Guardia Civil ha detenido en
Brenes (Sevilla) a tres personas, en concreto una pareja de nacionalidad polaca y un ciudadano español, como presuntos autores de un
delito contra la salud pública con productos alimenticios, pues supuestamente elaboraban y vendían
chicharrones sin el preceptivo registro sanitario y los distribuían en bares y establecimientos públicos.
En este sentido, y según ha informado el
Instituto Armado en un comunicado, el Grupo de Investigación de la Guardia Civil de Cantillana sospechaba que unos vecinos de Brenes podrían estar dedicándose a la elaboración y venta de chicharrones sin cumplir la normativa vigente para estos productos.
Así, y tras varios meses de investigación, los agentes sorprendieron a S.T.W. cuando realizaba la venta de estos derivados del cerdo en un establecimiento abierto al público. Al inspeccionar el vehículo que utilizaba, los agentes comprobaron que transportaba varias cajas de chicharrones sin etiqueta, marca ni registro sanitario alguno.
La Guardia Civil averiguó también que los derivados cárnicos se elaboraban en un local de Brenes que funcionaba como
almacén y fábrica ilegal. Tras inspeccionar las instalaciones, se comprobó que el establecimiento carecía de licencia de apertura así como de cualquier control sanitario.
En una cámara frigorífica, los agentes localizaron
150 kilogramos de carne destinada supuestamente a la elaboración de los chicharrones.
Por todo esto, la Guardia Civil ha detenido a los dos administradores de la sociedad, identificados como A.C.R., de 41 años, y A.P., de 37 años, pareja de la persona que realizaba la venta, de 41 años y que responde a las siglas S.T.W.. Estos dos últimos son de nacionalidad polaca y vecinos de Brenes. A los tres se les investiga por un supuesto delito contra la salud pública con productos alimenticios.
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