El
Sevilla F.C. ha mostrado porque es el dominar de la
UEFA Europa League. El conjunto de
Emery ha ganado con mucha contundencia (3-0) al Molde FK entrenador por el noruego Ole Gunnar Solskjær, correspondiente a la ida de los dieciseisavos de final de la competición.
Unai Emery alineaba a un equipo titular, con las novedades de David Soria en la portería y de Fernando Llorente en la punta de ataque. El Fuenterrabía alineó el siguiente once: David Soria; Coke, Carriço, Kolodziejczak, Escudero; N'Zonzi, Cristóforo; Vitolo, Banega, Krohn-Dehli; y
Llorente.Los nervionenses salieron un poco dormidos al césped, tónica habitual últimamente, aunque lograron tener el control del balón y lo manejaron a su antojo, pero no encontraron la forma de atravesar la barrera defensiva de los noruegos.
No fue hasta casi los 20 minutos de partido cuando el Sevilla, con un disparo de Banega, creó peligro sobre la portería de Horvath. El argentino, uno de los más activos de la primera mitad junto a Vitolo, armó la pierna derecha y soltó un zapatazo que pasó muy cerca del palo izquierdo del meta rival.
El
Molde consiguió aguantar el arreón del Sevilla, aunque en ataque lo más peligroso que realizó el cuadro nórdico (en los primeros 45 minutos) fue un disparo de Gulbrandsen.
Pese a estar media hora desaparecido, Fernando Llorente comenzó a cocinar su gran noche. Su primer intento hizo presagiar lo que sucedería cuatro minutos más tarde. El riojano, en fuera de juego y a pase de Vitolo, puso el balón ajustado al palo izquierdo del portero estadounidense para desquitarse la mala racha que sufría desde que anotará ante la Juventus en Champions League.
Tras el descanso, el ex de la Juventus salió más motivado. El delantero sevillista anotó, en esta ocasión a pase de Coke, el segundo gol del partido y de su cuenta particular.
El
Molde fue desapareciendo del partido progresivamente y se notó que no jugaban un partido oficial desde hacía dos meses. No le aguantaba el físico a los noruegos y el Sevilla no se bastaba con el 2-0. Tras una chut de Coke, que se estrelló en el larguero y que casi supone el 3-0, y muy buenas combinaciones de derecha a izquierda, Kévin Gameiro, que entró en sustitución de Fernando LLorente, no faltó a su cita con el gol y sentenció la eliminatoria con un zapatazo que pasó por debajo de un desafortunado Horvath.
Los de
Unai Emery continúan con su racha de victorias en Europa y demostraron una vez más que la
Europa League sigue siendo su competición estrella. Los nervionenses igualan también el récord de victorias en casa que tenía el equipo de Juande Ramos.
José Antonio Rivero3 min lectura