El
Sevilla vuelve hoy, cuatro años después de su última visita, a pisar el estadio de
El Molinón, feudo que históricamente no se la ha dado nada bien y donde sólo ha podido ganar en uno de sus siete últimos encuentros contra el
Sporting de Gijón; ocho de 36 en total.
La última victoria fue el 13 de noviembre de 2009, cuando se impuso por un exiguo 0-1. Un solitario gol de Kanouté dio los tres puntos al equipo dirigido por Manolo Jiménez contra los pupilos de Preciado.
Desde entonces, ningún jugador nervionense ha vuelto a celebrar un gol en Gijón: 2-0 en la 10/11 y 1-0 en la 11/12, último envite entre ambos equipos antes del descenso de los asturianos.
El partido llega con urgencias para ambos, pues el
Sporting, en plena lucha por la permanencia, sólo ha ganado uno de los siete últimos partidos en su casa. No obstante, estos problemas como local se equilibran con la crisis como visitante del
Sevilla, el único equipo de la Liga que no conoce aún el triunfo fuera. Lleva 16 desplazamientos seguidos sin vencer, en la que ya es la segunda peor racha de su historia.
El juez de la contienda será González González, un árbitro con el que los gijoneses no conocen la derrota en su feudo y que no trae buenos recuerdos para los de Nervión, que han perdido nueve de sus 14 citas con el castellano-leonés y sólo han ganado cinco.
Estadio Deportivo2 min lectura