El 'caso Vitolo' sigue viviendo nuevos episodios. Este miércoles, como el resto de los internacionales,
el canario tenía que haberse presentado a su primer entrenamiento a las órdenes de Eduardo Berizzo. Sin embargo, el extremo no apareció a las 08:30 horas en la ciudad deportiva. En el Sevilla, no obstante,
estaban al tanto, y es que Óscar Arias aseguró momentos después a
laSexta en la puerta de cristales del estadio que
habían dado permiso al futbolista para ausentarse.
Vitolo se marchó ayer a Madrid. En el Sevilla aún esperaban a que se pasase por las oficinas del Sánchez-Pizjuán para firmar lo pactado y, en cambio, lo que hizo fue
salir por los aparcamientos, junto a su padre, montándose en un taxi que llegó desde La Palmera, donde dos de sus agentes,
Margarita Garay y Gustavo Cañizares, habían mantenido una reunión previa con el Betis, para la salida de Rubén Castro, y que tenían previsto más tarde mantener una reunión por Jesús Navas con Castro que nunca llegó a celebrarse.
El caso es que todas las partes esperan que el futbolista, con dinero que el Atlético de Madrid está buscando desesperadamente, abone el importe de su cláusula de rescisión (
35,7 millones de euros) en LaLiga. Ahora bien, de no hacerlo, Vitolo
está obligado a pernoctar esta noche en la capital hispalense, para salir así por la mañana con el resto de la expedición destino a Japón.
Que, llegado el caso, tampoco apareciese, ya sería una película bien distinta...