La situación de
Carlos García en el
Betis a día de hoy es complicada. El canterano, que no ha participado en la pretemporada del Betis con
Pepe Mel, aunque sí lo hizo debutar en la 12/13 ante el
Zaragoza. Sí contó el verano pasado para
Julio Velázquez, cuando estuvo muy cerca de quedarse en el primer equipo. Pero finalmente, el míster salmantino decidió que continuara en el filial un año más.
De la mano de
Juan Merino, el centrocampista ha completado una gran temporada, en la que ha crecido y ha ganado en
agresividad y
carácter. Sin embargo, dicho crecimiento no le valdrá para hacerse esta campaña con una ficha del primer equipo.
Pepe Mel ya le ha hecho saber que
no cuenta con él. Ése sería su gran sueño, jugar con el primer equipo, pero ante la imposibilidad de hacerlo y las aspiraciones del sevillano de seguir creciendo, el
Betis le ofreció la alternativa de salir
cedido a un equipo de Segunda división, aunque no le ha salido nada.
Sin embargo, el que fuera capitán del
Betis B la temporada pasada no maneja tantas opciones, por lo que ha solicitado al club la
rescisión de su contrato, que finaliza en 2017, para poder elegir su futuro.
Su segundo mejor tren: el Sporting de GijónAsí pues, al centrocampista verdiblanco le ha llegado una propuesta prácticamente irrechazable. A través de un intermediario, el
Sporting de Gijón le ofrece dos años de contrato. Eso sí, el jugador debería llegar con la
carta de libertad bajo el brazo y como mucho, antes de que finalice esta semana. Si no, los sportinguistas mirarán otras alternativas. Dos
temporadas le ofrece el conjunto asturiano, pues no estaría dispuesto a una cesión para promocionar a jugadores de otros equipos.
Evidentemente,
Carlos García entiende que se trata de una oportunidad casi única para proseguir con su carrera deportiva en la elite. Pero en
Heliópolis no están por la labor de
rescindir así por que sí y tener que abonarlos los dos años que le restan, unos
400.000 euros, por lo que le han dado la posibilidad de que perdone el dinero.
¿La solución? Bien podría estar en un término medio. Pero eso sí, debería ser cuanto antes si Carlos García no quiere perder su segundo mejor tren...