Sucedió en un partido de la liga noruega entre Stomgodset IF-Haugesund. El jugador del equipo visitante, Haris Hajradinovic, cometió penalti y su portero le recriminó la acción. Los jugadores se encararon y todo terminó en una pelea. El árbitro no dudó en expulsar al jugador, quién golpeo al portero Espen Bugge a la altura del cuello.