Estadio Deportivo3 min lecturaVitoria, 31 mar (EFE).- El Anadolu Efes, próximo rival del TD Systems Baskonia este jueves en el pabellón Buesa Arena, podría abrir la puerta del ?playoff? de la Euroliga al conjunto vitoriano si éste consigue superar al plantel turco, uno de los equipos más en forma del momento.
La victoria ante el Panathinaikos y las derrotas de Zenit y Real Madrid, han dejado a los azulgranas en una posición de ventaja para entrar en la siguiente fase europea. Los baskonistas dependen de sí mismos para continuar en la competición y un triunfo ante los hombres de Ergin Ataman les haría meter un pie en la ronda a la Final a Cuatro continental.
El coliseo vitoriano acogerá a dos equipos en racha. Los turcos firman diez victorias en once partidos, mientras que los vascos alcanzan nueve triunfos en diez enfrentamientos.
El conjunto de Estambul se presenta a este duelo tras superar con contundencia al Real Madrid en un partido redondo con la participación de prácticamente toda su plantilla con especial mención Shane Larkin y Vasilije Micic, que llevan el timón de un plantel al que le ha costado tener regularidad este curso.
Su gran racha les ha permitido ascender al tercer puesto de la clasificación. Muestra de ello fue la amplia victoria lograda por el Baskonia en el choque de la primera vuelta disputado en Turquía y en el que los azulgranas se impusieron con comodidad por un 59-77, en lo que fue la peor anotación del Efes en las tres últimas campañas.
Sin embargo, ahora el equipo de Ergin Ataman está en un momento dulce, tal y como demostró ante el Real Madrid la pasada jornada. De hecho el único partido que ha perdido en los dos últimos fue por un punto ante el Bayern Múnich.
El Baskonia tendrá que mantener el nivel anotador que tuvo en el Oaka, donde firmó un 70 % en el lanzamiento exterior, así como la velocidad de su juego para combatir al Efes, que destaca por su calidad individual y por su capacidad física en la pintura.
A pesar de todo, una derrota mantendría las posibilidades baskonistas de colarse contra pronóstico entre los ocho mejores del continente, después de un comienzo dubitativo en la competición.