La última Copa de Raúl Entrerríos y Víctor Tomás

La fase final de la Copa del Rey que arrancará este viernes en Madrid estará marcada por la despedida de dos de las grandes referencias del balonmano español en la última década, los barcelonistas Raúl Entrerríos y Víctor Tomás, que disputarán su último torneo copero.

Si la retirada de Entrerríos, que anunció hace tiempo su decisión de poner fin a su carrera deportiva a la conclusión de la presente temporada, ya estaba en cierto modo asumida, la inesperada marcha de Víctor Tomás aún sigue despertando una sensación de incredulidad y desasosiego.

Obligado a abandonar las pistas al final de curso por sus problemas cardiacos, la despedida del capitán del Barça dejará huérfano al balonmano español y, sobre todo, al conjunto catalán de un jugador que ha ejercido durante años como el auténtico corazón del equipo azulgrana.

Un adiós que dotará de una motivación añadida a los jugadores del todopoderoso Barcelona, que quieren ver a Raúl Entrerríos y Víctor Tomás levantando un nuevo trofeo de la Copa del Rey, el séptimo de manera consecutiva, en la Caja Mágica.

Triunfo del que nada, ni nadie parece en disposición de apartar a los azulgranas, dada la superioridad de los de Xavi Pascual no sólo ya en las competiciones nacionales, sino también en el panorama continental, como atestigua su trayectoria en la Liga de Campeones.

Pero pese a que el resto de rivales parece resignarse a acompañar al Barça en la final, lo que les garantizaría la presencia en las competiciones europeas, quien más y quien menos se aferra al carácter impredecible del torneo copero para soñar con la gesta de derrotar al gigante azulgrana.

Empezando por el Fraikin Granollers, el rival del Barcelona en los cuartos de final, que puede presumir de ser el único equipo que ha sido capaz de ganar en los últimos siete años a los de Xavi Pascual, tras imponerse por 28-29 en abril de 2018 en su visita al Palau, en cualquier competición nacional.

Si el estreno del Barça en la competición no se antoja nada sencillo, más exigente se prevé todavía, en el caso de derrotar a los vallesanos, el encuentro de semifinales en el que los azulgranas se medirían con el vencedor del duelo entre el ABANCA Ademar de León y el BM. Logroño La Rioja.

Los leoneses, segundos clasificados de la Liga Sacyr ASOBAL, y los riojanos, terceros, protagonizarán la eliminatoria estrella de los cuartos de final, un choque de estilos entre el intenso y agresivo juego que proponen los de Manolo Cadenas y el balonmano más academicista que practican los de Miguel Ángel Velasco.

Un enfrentamiento en el que el Ademar no podrá contar con el lateral David Fernández, sometido recientemente a una operación de rodilla, y que fue fundamental en el triunfo (34-31) que los leoneses lograron sobre el BM. Logroño en la primera vuelta del campeonato liguero.

Pero si Cadenas no podrá alinear al joven internacional español, quienes sí estarán presentes disponibles son el central brasileño Acacio Marques, que tras varios meses alejado de las pistas poco a poco va recuperando su mejor nivel, y el argentino Fede Vieyra, que llega al torneo en su mejor momento de la temporada.

Al igual que el lateral derecho del BM. Logroño Imanol Garciandia, que ya fue uno de los máximos responsables del subcampeonato que los riojanos lograron hace dos años en Madrid, y que ha dejado una magnífica impresión en las últimas jornadas.

Si el Barça se perfila como el máximo favorito para alcanzar la final por la parte alta del cuadro, por la baja el Bidasoa Irún y el Liberbank Cuenca, finalista el pasado año, se presentan como los principales candidatos para pelear por el título con los azulgranas.

Para ello, el conjunto irundarra, finalista este curso de la Copa ASOBAL, deberá superar antes en los cuartos de final al BM. Benidorm, un debutante en la fase final, pero que ya ha demostrado esta campaña poseer argumentos suficientes para pelear con cualquier rival.

Tal y como pudo comprobar el Bidasoa hace apenas un par de semanas en el encuentro que enfrentó a ambos conjuntos en Artaleku y en el que los de Jacobo Cuétara sufrieron los indecible para rescatar un empate (27-27) ante los alicantinos.

Más halagüeños son los precedentes para el Liberbank Cuenca, que se impuso el pasado domingo por 27-23 al Helvetia Anaitasuna, su rival en los cuartos de final, en un encuentro que los de Lidio Jiménez decantaron a su favor gracias a una sobresaliente primera parte.

Pero harían mal los conquenses en fiarse ante un rival, que llega a la Copa sin nada que perder y con la presencia en sus filas de una de las grandes revelaciones de la Liga ASOBAL, el jovencísimo central Ander Izquierdo, que pese a sus tan sólo 19 años el seleccionador Jordi Ribera ya ha hecho debutar con los "Hispanos B".