Estadio Deportivo2 min lecturaMadrid, 13 jul (EFE).- Para reducir el riesgo de contagio por covid-19, los deportistas que conviven en la Residencia Joaquín Blume y aquellos que entrenan en las instalaciones del Centro de Alto Rendimiento de Madrid se enfrentan durante estas semanas a estrictas medidas de seguridad.
Según explicaron a EFE fuentes del Consejo Superior de Deportes (CSD), el objetivo es "intentar mantener los contagios de covid-19 a cero", de ahí que se restrinja el acceso al recinto del CAR a todos los medios de comunicación y visitas mientras dure la burbuja. Sólo se autorizará su presencia en exteriores y siendo muy restrictivos con las autorizaciones.
Esta medida se extenderá durante todo el mes de julio y del 3 al 19 de agosto para reducir el riesgo de contagio entre los deportistas olímpicos y paralímpicos que competirán en los Juegos de Tokio.
"A las Federaciones no se les autorizará el acceso a las instalaciones deportivas a nuevos deportistas, de no cumplir el requisito de burbuja completa (en agosto) y que participen en algún campeonato internacional de relevancia en el próximo mes de septiembre. Si el campeonato se celebrase en los siguientes meses (de octubre en adelante) se concederá el acceso a las instalaciones después del 19 de agosto", explican fuentes del CSD.
Asimismo se comunicará a las empresas externas que restrinjan al máximo la utilización de las instalaciones, intentando mantener el mínimo contacto con los deportistas.
Junto a estas medidas se solicita la colaboración de todo el personal del CSD, intentando que prescindan de bajar a las instalaciones utilizadas por los deportistas de alto rendimiento hasta el 19 de agosto.