Hay futbolistas que tienen innumerables oportunidades, pese a aportar poco a su equipo, y otros que no le entran nunca por el ojo al entrenador de turno. Aunque hagan malabares. Y de esto último sabe mucho
Paulo Henrique Ganso, quien destaca cada vez que juega y que juega, según lo que reflejan las estadísticas, menos de lo que debería.
Importa poco que con el brasileño sobre el campo el Sevilla gane casi siempre. Al final, se queda fuera de la lista o en el banquillo, tanto con el 4-3-3 como con
un 4-2-3-1 que, al utilizar a dos pivotes defensivos,
le vendría de maravilla. Berizzo ha dejado de rotar y su único mediapunta, hasta el momento, es
Éver Banega, estando
Krohn-Dehli en el segundo escalón de su lista.
Ni Ganso, ni Franco Vázquez, ni Borja Lasso.
El caso es que el ex del Santos y el Sao Paulo está firmando los mejores números de su carrera en el apartado que mejor se le da, el del gol. Sobre todo, en regalarlos. Y es que Ganso
ha participado en el 66,6% de los tantos que ha hecho el Sevilla cuando ha estado él sobre el campo. Su récord personal, según refleja
Goal. En total, ha firmado dos dianas y ha puesto en bandeja otras dos en los seis encuentros en los que ha participado.
Berizzo, sin embargo, sigue obviándolo, seguramente por no tener el brasileño
el fondo necesario para ejecutar su idea de presión constante en campo contrario. Ganso, mientras, sigue guardando algunos taconazos en sus chistera.