El Ocampos más personal, sus penaltis errados y la espinita de Colonia

El Ocampos más personal, sus penaltis errados y la espinita de Colonia
- J. L.
Estadio DeportivoEstadio Deportivo 5 min lectura
Sólo hizo falta un año para que Lucas Ocampos se convirtiera en un ídolo para el sevillismo. Sin ser '9' fue el principal referente ofensivo de la pasada temporada y uno de los culpables de que el equipo de Lopetegui cerrara la campaña levantando su sexta Europa League. Un triunfo que él disfrutó especialmente por una frustración previa en un torneo al que le tenía muchas ganas.

"Antes de viajar le comenté a mi mujer: 'me voy y el que gana sigue'. Y le dije: 'voy a volver con la Copa'. Había muchas cosas en juego. Si perdías te volvías. Era matar y morir. Me tocó hacer el gol -ante los Wolves- y pasar a la semifinal. Se me venían muchas cosas de la Europa League que perdí en 2018, que estuvimos muy cerca con el Olympique de Marsella. Tenía esa espinita y tenía muchas ganas”, indica el internacional argentino, que ha sido el protagonista de ABP en SFC TV, donde ha recordado cómo fue ese partido de cuartos ante el Wolverhampton, ese triunfo que les hizo creer que el título era posible. “Muchas cosas vienen a la cabeza de ese partido y ese gol. No empezamos bien, ellos fallan un penal que ataja Bono y el partido fue nuestro. Ellos estaban bien y tenían mucho peligro, pensábamos en que jugábamos bien, pero ellos podían marcar", admitía.

Esa Copa se ganó por un espíritu de camaradería que transmitían todos los jugadores cada vez que hablaban. "Me acuerdo que ya sabíamos que nos quedábamos en Alemania y estábamos encerrados todos en el hotel. La cabeza se te va para cualquier lado, pero acá era todo lo contrario, hasta los canteranos que vinieron disfrutaron de lo lindo. Ganando, con los paseos, las habitaciones, con la Play también... al final pasó lo que pasó, ganamos esa copa importante. Estábamos antes de festejar hablando con nuestras familias y en ese momento nos juntamos todos, empezamos a poner música y a saltar", indicaba.

Y si esos eran los recuerdos felices, éste año llegaron los palos. En especial, el de su error en Copa que impidió el pase a la final. "Son dos penaltis que erré -también el del domingo pasado-. Me dolió mucho el del Barcelona, porque venía de hacer 11 o 12 seguidos, había estado lesionado, adelantamos la recuperación y sentía que era la noche perfecta para hacer el gol y pasar a la final, pero no fue así. Estuve uno o dos días deprimido conmigo mismo, sabiendo que era un momento importante, pero teníamos partido dos días después y todos me apoyaron un montón. Son circunstancias del fútbol también, no me siento el mejor cuando hice el penal a Neuer en la final de la Supercopa y ahora tampoco me siento el peor. Nosotros siempre practicamos con Bono también los penaltis, porque los ataja bien, cuando llegó Raúl Jiménez lo paró y después hizo varios más", desveló.

En una entrevista más centrada en lo personal, Ocampos señaló que no tiene grandes ambiciones y que disfruta del momento. “Vivo el día a día. No tengo grandes cosas que digo, éste es mi sueño. Seguir estando a este nivel en un equipo grande, jugar en mi selección que ya lo cumplí, en la que deseo mantenerme y ganar algo. Sobre todo, seguir siendo como soy, un buen padre, una buena persona, y disfrutar de esto que es lo que más me gusta”, aseguraba el argentino, quien sí echa de menos haber disfrutado más de su jueventud en su país.

“Ahora que voy creciendo y madurando, reflexiono muchísimas cosas. A veces me pongo a hablar de mi mujer y le comento mis pensamientos, porque ella vivió todo este transcurso conmigo. Va todo muy rápido. Desde los 14 o 15 que pasé a River fue todo muy rápido. Un año de inferiores, Primera, venta, otro idioma, otra cultura, otro fútbol... Extrañar a la familia, amigos. Me fui de Argentina con 18 recién cumplidos, un momento muy importante en la vida de cualquier adolescente, y yo vivía una realidad totalmente diferente. Con presiones, un traspaso a otro equipo millonario. Costaba asimilar, pero siempre me mantuve como soy. Tenía gente y sigo teniéndolos; y siempre me hacen ver la realidad de la vida”, admitía.
Unete a nuestro canal de Whatsapp Únete a nuestro canal de Telegram