Como se esperaba, el encuentro de ayer frente al
Mallorca resultó especialmente emotivo para
Rubén Castro, quien el pasado viernes se convirtió en el máximo goleador verdiblanco de todos los tiempos. Por este motivo, el beticismo le rindió un sentido homenaje durante unos prolegómenos que vieron cómo el
Villamarín lucía sus mejores galas para la ocasión. Así, se desplegó una bonita pancarta en honor del canario en la grada de
Fondo, al tiempo que todos sus compañeros le esperaron en el centro del campo vistiendo camisetas que servían para darle la enhorabuena.
A ellos se unió en medio de una sonora ovación el propio ‘24’, llevando otra elástica con un logo donde acaparaba protagonismo su número de goles como heliopolitano, 95, pero donde también recordaba a todos los técnicos y futbolistas con los que ha compartido vestuario desde el verano de 2010, así como a su madre, a quien le hacía una especial dedicatoria.
Sea como fuere, una vez que
Rubén Castro estuvo junto al resto de la plantilla se proyectó un vídeo con todos sus ‘chicharros’ en el marcador. De este modo, y entre constantes muestras de cariño desde la grada, el
Benito Villamarín rindió pleitesía al que, según las estadísticas, es el mejor delantero de cuantos han lucido la zamarra de las trece barras.
Igualmente, el canario ejerció como capitán durante el partido, donde no marcó, pero sí participó en el tanto de la victoria, que firmó
Rennella tras un rebote de un disparo suyo.