El entrenador del Espanyol, Quique Sánchez Flores, ha destacado, tras la victoria por 0-1 en el Villamarín, que están "trabajando para ser un equipo equilibrado en defensa y en ataque" y ha considerado que le "taparon los ojos" a un Betis que no cree "que tenga motivos para ponerse nervioso".
El preparador madrileño ha relatado en la sala de prensa del estadio heliopolitano que "el fútbol es algo tramposo", al recordar que en la pasada jornada el Eibar les metió tres goles como visitante y que este domingo han dejado la puerta a cero en Sevilla.
Quique puntualizó, sobre la jugada al final del partido en la que pudo llegar el empate del Betis, que no se queda tanto con la gran parada de Diego López a Pezzella y sí en estudiar "quien perdió la marca" para que el rival rematara.
El técnico del Espanyol apuntó que "cualquier victoria es buena" y que ésta se ha conseguido "en unas condiciones difíciles ante un equipo que venía de ganar y que de vencer otra vez hoy se metía en otra competición". "Y todo, con un campo lleno", ha remarcado.
Quique ha reconocido que le gustó más la primera parte del Espanyol "con un juego más equilibrado defensa-ataque" y que en el segundo tiempo estuvieron "mas retrasados", pero supieron "defender bien".
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