La delicada situación del equipo, no tanto por su clasificación como por la pobre racha de resultados, con sólo dos puntos obtenidos de los últimos 18 en juego, necesita que todos en el Betis remen en una misma dirección. Y eso es lo que pretende y solicita uno de sus mayores baluartes, el capitán Joaquín Sánchez.
Después de que la plantilla haya cerrado filas en torno a Quique Setién, cuyo puesto quedó en entredicho tras la derrota ante Las Palmas, el portuense ha lanzado un mensaje de unidad a la afición, buscando su fiel apoyo, que ha calado hondo en las redes sociales.
“Juntos siempre”. Eso es lo que le pide el extremo al beticismo para poder salir del actual bache, escenificándolo con un curioso y simpático vídeo de pingüinos que luchan juntos ante el ataque de un tiburón u otro de hormigas que hacen lo propio frente a un oso hormiguero. Todo ello, acompañado de las etiquetas #aficion #realbetisbalompie y #noslevantaremos.
El mensaje, además, procede de la que puede ser, sin duda, la voz más autorizada del vestuario. Toda una institución en el club de Heliópolis que también lo es a nivel nacional. No en vano, acostumbrado a batir récords casi en cada jornada, ante el Atlético de Madrid, el pasado domingo, batió uno más, convirtiéndose en el jugador con más partidos disputados en la historia de LaLiga en el siglo XXI.
En concreto, según los datos ofrecidos por la cuenta de Twitter @LaLigaenDirecto, el portuense ha igualado los 468 encuentros disputados por Iker Casillas en el Real Madrid. Un registro que el jugador verdiblanco, a sus 36 años, está empeñado en pulverizar. Y es que, además de ser un peso pesado del vestuario, Joaquín es un pilar básico en los esquemas de Setién, que ha contado con él en los 15 partidos ligueros disputados, en 14 de ellos como titular, en los que ha anotado tres goles y ha dado una asistencia.
El ex de la Fiorentina, de hecho, es el quinto jugador de la plantilla más utilizado en LaLiga con 1.186 minutos, sólo por detrás de Antonio Adán, Barragán, Mandi y Andrés Guardado.
Fernando Mateos3 min lectura