En un proyecto a tres años, la actual se presentaba como una temporada de transición para el Sevilla. Tantas bajas -entre ellas algunas de mucho peso como las de Navas, Negredo, Kondogbia o Medel- y altas, hasta 14, exigían paciencia para un equipo que firmaba temporadas mediocres tras haber tocado la gloria -ganó seis títulos en cinco años y fue denominado ´mejor equipo del mundo´ por la IFFHS-. A los de Emery, de hecho, les costó arrancar, hasta el punto de que llegaron a ser colistas y de que el técnico vasco recibió un ultimátum, antes de visitar Cornellá, que le obligó a disfrazarse de Groucho Marx: "Estos son mis principios, pero, si no les gustan, tengo otros". Así, el cambio de Rakitic a la media punta le dio la necesaria consistencia defensiva al equipo para que comenzase a soltarse, llegando al día de hoy con opciones de acabar en la cuarta plaza, así como de poder ganar otra Europa League, el torneo que le hizo grande.
El rival
Tras eliminar heroicamente al Betis en los penaltis y deshacerse contra todo pronóstico de un Porto, eso sí, venido a menos, los nervionenses deseaban evitar en semifinales a toda costa al Benfica, flamante campeón de la Liga Zon Sagres, y a la potente Juventus, por lo que el Valencia, pese a ser otro club español, se antojaba como el rival menos fiero. Aun respetándole, porque tiene armas para hacerle daño (se vigilará con atención la conexión Parejo-Fede-Feghouli), en la mitad blanquirroja de la ciudad se ha vuelto a instalar el denominado ´espíritu de los títulos´, contra el que no ha podido ningún rival. Se huele el éxito; se respira euforia, aunque sin presunción. Se cree, sin más.
El árbitro
Ni se habla de ello ni se hablará. Las quejas desde Valencia se han tomado como simples lloriqueos de quien se siente inferior. Esperemos que tras esta emocionante eliminatoria no tengamos que hablar ni a orillas del Guadalquivir ni del Turia de amigo Skomina.
Unai Emery
Ante su exequipo, el vasco buscará su primera final. En Valencia le llovieron palos: una motivación más.
Estadio Deportivo
