Reclutar a tanto futbolista de talento contrastado puede generarle un bendito dilema al entrenador, con numerosos mimbres entre los que elegir a la hora de componer un once. Un 'problema' al que se enfrenta
Jorge Sampaoli por la cantidad de opciones de las que dispone, la mayoría de un nivel altísimo y parejo que propiciarán una durísima competencia en todas las posiciones, y, sobre todo, en la segunda línea.
No en vano, el casildense se verá obligado a tomar decisiones difíciles en cada demarcación, incluida en la portería, puesto en el que, hasta hace pocas fechas,
Sergio Rico se erigía en indiscutible pero que ahora cuenta también con el experimemntado
Sirigu, fichado tras la lesión de
David Soria y que recrudece la carrera por la titularidad.
El internacional italiano no llegó a tiempo para el partido en El Madrigal y el de Montequinto se reivindicó con una actuación espectacular, dejando la pelota en el tejado de
Sampaoli, que, ante la primera oportunidad de hacerlo, tendrá que decidir si le da entrada al meta procedente del PSG o prolonga la confianza en Sergio Rico. Pero ésta no será la única determinación motivada por las recientes incorporaciones, ya que
Samir Nasri, el último en aterrizar, también se encuentra a su disposición y queda por ver si le hará ya un hueco en el once inicial del sábado contra los canarios.
Su entrada supondría sacrificar a alguno de los fijos hasta este momento, diatriba a la que, con tanta calidad, se enfrentará de forma constante en este curso.