El Sevilla tiene todas las miradas puestas en el 'play off'

Con el Trofeo Antonio Puerta, ante la Roma, como última piedra de toque en pretemporada, Eduardo Berizzo tiene ya su cabeza puesta en el Istanbul Basaksehir, rival nervionense en los 'play off' de la Liga de Campeones. Una eliminatoria que se convertirá en el debut oficial de los de Nervión, disputándose la ida en Estambul el próximo día 16 y estando prevista la vuelta para el 22.

Una ronda previa de la que dependerá, en gran medida, la temporada sevillista, y no sólo en el plano deportivo. Y es que no es el técnico argentino el único que tiene sus miras puestas en el Istanbul Basaksehir, sino también el director deportivo Óscar Arias y el presidente José Castro.

Mientras que el onubense ultima la planificación deportiva del Sevilla 17/18, conseguir el pase a la fase de grupos de la máxima competición continental a nivel de clubes, donde la exigencia deportiva es máxima, influirá mucho en ello, amén del aspecto económico, pues disputar la Liga de Campeones supone, también, disfrutar de unos suculentos ingresos que facilitarían, sin ir más lejos, el hecho de hacerse con un tercer delantero de garantías para la punta de lanza nervionense. Dinero, por tanto, que podría ser invertido de manera más holgada en operaciones importantes como las de Stevan Jovetic o Carlos Bacca, quienes aportarían su gol a un equipo que lo requeriría aún más en Champions.

El presidente, por su parte, tiene marcado en el calendario la eliminatoria frente al Basaksehir turco como la posible fecha de un nuevo episodio de la guerra de poder que se vive en el club, sabedor de que un fracaso deportivo de tal calado sería aprovechado por sus contrarios para intentar desestabilizar nuevamente la paz social, como ya hicieran semanas atrás cuando José Castro quedó retratado públicamente anunciando la 'renovación' de un Vitolo que horas después acabó volando a Las Palmas para ser presentado por el conjunto insular, previo paso por Madrid para firmar con el Atlético, club al que se unirá el próximo mes de enero cuando cumpla la sanción FIFA que recae sobre los colchoneros.

Es decir, una previa de la Champions que esconde mucho más de lo aparente y que tiene detenidos, a la espera, varios frentes importantes para el futuro próximo de la entidad blanquirroja, tanto en lo deportivo, lo económico como lo institucional. Un pase que, de consumarse, asegurará en el seno del club otras victorias más allá de la mera e importante presencia en la Liga de Campeones.

Una eliminatoria de casi 13 millones
Conseguir el pase a la fase de grupos, ante el Istanbul Basaksehir, supondría a los de Nervión una importante inyección económica, pues se asegurarían un ingreso mínimo de casi 13 millones de euros (12,7), que es lo que la UEFA otorga a cada uno de los 32 participantes de la fase inicial de la Liga de Campeones. Eso, sin contar los 1,5 millones por victoria y el medio kilo que se reparte por empate, siendo seis los partidos a disputar. Es decir, una final a doble partido que se convertirá en la primera gran ‘final’ de Eduardo Berizzo como técnico sevillista.