El
Sevilla dispone de dos semanas de parón liguero para consolidar esos aún tímidos atisbos de mejoría que se aprecian en el equipo que dirige
Eduardo Berizzo, que en estas once jornadas ha evidenciado serios problemas a la hora de crear peligro arriba y de perforar la portería rival; todo ello, a pesar de que las estadísticas revelan que es uno de los equipos de LaLiga que más tiempo tiene en su poder el balón.
En concreto, sólo tres de los 20 clubes de
Primera división tienen un porcentaje medio de posesión mayor que el de los blanquirrojos, que con un 56 por ciento sólo está por debajo de
Barcelona (65%),
Real Madrid (62,4%) y
Real Sociedad (60,6%).
Aunque pueda parecer justo lo contrario, los partidos que más domina el
Sevilla son los que juega de visitante. A pesar de que encadena cuatro derrotas a domicilio (ante
Atlético, Athletic, Valencia y Barcelona), los de Nervión tienen también el cuarto mejor índice de posesión como visitante. Entre sus seis encuentros lejos del
Ramón Sánchez-Pizjuán promedia un 53 por ciento; cifra que sólo superan los culés (67,4%), los merengues (62,4%) y los 'txuri-urdines' (60,6%).
Para muestra, un botón: el día que menos tiempo ha tenido el balón en su poder fue el pasado sábado en el
Camp Nou, cuando gracias a su gran segunda parte fue capaz de quitarle un 44 por ciento de la posesión al
Barça, el rey en este aspecto del juego.
Su récord fue en casa, con un 62 por ciento ante el
Leganés; pero, aunque en
Eduardo Dato sigue invicto (cuatro triunfos y un empate), el
Sevilla baja como local hasta el sexto puesto, con una media del 59 por ciento y por detrás del
Betis (63,3%), el
Real Madrid (62,7%), el
Barcelona (62,5%), la
UD Las Palmas (61,4%) y el
Celta (60,2%).
Es decir, que el
Sevilla del 'Toto' tiene la posesión pero, hasta el momento, no la aprovecha o no le está sacando todo el rédito que podría. No en vano, los nervionenses sólo han sido capaces de meter 12 goles en 11 partidos, nueve en las cinco citas como local y sólo tres en seis a domicilio, cifras que están entre los peores registros de su historia a estas alturas del campeonato.